BARCELONA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
El territorio catalán cuenta con un total de 103 Servicios de Información y Atención a las Mujeres (SIAD), según anunció hoy la consejera de Acción Social y Ciudadanía de la Generalitat de Cataluña, Carme Capdevila.
Estos centros ofrecen asesoramiento e información sobre el ámbito laboral, social y familiar a las mujeres, y están especialmente centrados en la atención y ayuda a las víctimas de malos tratos. La consejera definió los SIAD como "herramientas de prevención y sensibilización".
En rueda de prensa, explicó que se ha pasado de los 25 centros en 2005 a los 103 en 2009, pero repartidos de forma desigual en el territorio. "Sabemos que una mujer de Barcelona tiene más acceso a los SIAD que una del Pirineo o de Terres de l'Ebre, pero se está haciendo un esfuerzo muy importante para que las comarcas también tengan centros de este tipo", aseguró Capdevila.
Por el momento, hay 43 en Barcelona, 13 en Lérida, 10 en Gerona, 9 en Tarragona y tres en las Terres de l'Ebre. Sin embargo, manifestó su voluntad de que la presencia de estos centros crezca en las poblaciones con más de 20.000 habitantes.
Precisamente, la consejera --con el apoyo del Institut Català de les Dones-- firmó hoy un convenio con la Asociación Catalana de Municipios (ACM) y la Federación de Municipios de Cataluña (FMC) para implicar a las entidades locales en este cometido.
La firma del acuerdo comporta un fondo económico anual de 2,1 millones de euros, que servirán para amplificar y consolidar la red de SIAD y concretar contratos programa para el periodo 2009-2010. El convenio responde también a criterios de equilibrio territorial.
La dotación económica supone un incremento del 88 por ciento respecto a las ayudas de 2008 para el funcionamiento de estos servicios. Concretamente, el fondo dará cobertura en 2009 a 82 servicios.
Estos centros proliferan en el marco de la Ley de Derechos de las Mujeres para la Erradicación de la Violencia Machista. El presidente de la FMC, Manuel Bustos, señaló el compromiso del mundo local con las mujeres, e instó a concebir la violencia de género como un "problema social, no sólo de las mujeres".
