ROMA 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Papa se reunirá a puerta cerrada con un grupo de quince víctimas de abusos sexuales del clero durante su visita a Bélgica, según ha revelado el director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Matteo Bruni, que ha señalado que será un encuentro privado que "tendrá lugar en total confidencialidad y sólo se anunciará una vez se haya celebrado".
Francisco llegará a Bruselas el jueves 26 de septiembre tras una parada de seis horas en Luxemburgo, donde se encontrará con los Grandes Duques, así como con la comunidad católica de este país.
El Pontífice mantiene este viaje pese a la "leve gripe" que sufre el Papa. El Vaticano ha informado esta mañana de que como medida de "precaución" ante esta visita, se cancelaban todas las audiencias papales previstas para este lunes.
Francisco, que hace menos de quince días regresó de su viaje de 12 días por Asia y Oceanía, que le llevó a visitar Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur, se reunirá con las autoridades de Luxemburgo y Bélgica, así como con miembros de las comunidades católicas locales.
En Bélgica, también mantendrá encuentros con el mundo académico, reuniéndose con profesores y estudiantes de la Universidad Católica de Lovaina, estrechamente vinculada a teólogos que desempeñaron un papel clave en el Concilio Vaticano II, así como a aquellos relacionados con la teología de la liberación. También se espera que Francisco mantenga reuniones privadas con funcionarios y dirigentes de la Unión Europea presentes en sus actos oficiales, aunque no se ha hecho pública la lista de esos encuentros. En todo caso, Bruni ha señalado que serán reuniones privadas de las que podrá ir informando a medida que tenga más información.
El Papa visitará en Lovaina la Nueva las dos sedes de la universidad católica de Lovaina: Katholieke Universiteit Leuven, de habla flamenca, y la Université Catholique de Louvain, de habla francesa. Se trata de una ciudad a las afueras de Bruselas construida precisamente para albergar este nuevo campus. La visita del Papa se enmarca en el 600 aniversario de su creación por parte del Papa Martín V en 1425.
En la Universidad Católica francófona, el encuentro será con estudiantes con los que afrontará distintos temas como las raíces teológicas y filosóficas en torno a las crisis sociales y medioambientales; las emociones -como la angustia de eco- y la implicación; la desigualdad; el lugar del hombre y de la mujer; el papel de la sobriedad y la solidaridad. En Lovaina, en la parte flamenca, el Papa Francisco se reunirá en cambio con profesores. El tema central del encuentro será la inmigración.
Otro de los puntos cruciales del viaje será la misa de beatificación de Ana de Jesús (1545 - 1621), que celebrará el domingo. Ana de Jesús fue una monja de la Orden de las Carmelitas Descalzas, formadora según el carisma de Santa Teresa de Ávila y San Juan de la Cruz, a la que se le reconoció un milagro atribuidos a su intercesión el 14 de diciembre de 2023, que la hizo beata. Está previsto que los miembros los Grandes Duques de Luxemburgo así como representantes de la casa real belga estén presentes en la misa final que se celebrará el domingo en el estadio Rey Balduino.
LA SALUD DEL PAPA
El año pasado, el Pontífice, que cumplirá 88 años en diciembre, sufrió varios problemas de salud. De hecho, estuvo hospitalizado dos veces, una, por un grave brote de bronquitis y otra, por una operación de hernia abdominal. Además, Francisco se ha visto obligado a cancelar su agenda por algún resfriado o gripe. El invierno pasado tuvo incluso que pedir a sus ayudantes que le leyeran los discursos porque se fatigaba demasiado. En diciembre, tuvo que cancelar un viaje a Dubai para asistir a una cumbre de las Naciones Unidas sobre el clima.
Francisco también padece ciática crónica y problemas de rodilla que a menudo le obligan a utilizar una silla de ruedas o un bastón, y ha sido operado de cataratas.
Actualmente, el Pontífice no tiene otros viajes anunciados para este año. A su regreso de Luxemburgo y Bélgica, presidirá del 2 al 27 de octubre la sesión de clausura de su Sínodo de Obispos sobre la Sinodalidad, un proceso de consulta mundial sobre el futuro de la Iglesia concluirá este año con una segunda reunión en Roma.