SEVILLA, 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
EL Parador de Ayamonte (Huelva) podría cerrar sus puertas al ser uno de los más afectados por el plan de reestructuración presentado este lunes 26 por la dirección de la empresa Paradores, según ha indicado UGT, que apunta que "aunque aún no tenemos cifras exactas, parece inevitable que tras este anuncio, el parador de Ayamonte se limite a la apertura estival o incluso se produzca el cierre definitivo".
Según indica el secretario general de la Federación de Turismo y Hostelería de UGT-A, Rafael Martín Arcas, otros paradores, como el de Cazorla (Jaén) "verán su actividad reducida, incluso se restringirán servicios como el restaurante o similares", de forma que el sindicato apunta que en Andalucía "500 empleados de los 16 paradores se verán afectados de un modo u otro por estas medidas", al verse afectada el 14% de la plantilla. Además, otro 14%-15% verán modificadas sus condiciones de trabajo.
Fuentes sindicales han indicado a Europa Press que en Andalucía hay 16 paradores aunque apuntan que "no son todos homogéneos en cuanto al número de trabajadores, pues las mayores instalaciones tienen entre 60 y 70 trabajadores, mientras que los paradores más pequeños pueden tener unos 15 empleados, de forma que la media son 40 trabajadores por cada centro de trabajo".
Las fuentes, quienes apuntan que por el momento no hay comunicación oficial a los sindicatos de los efectos de dicho plan de reestructuración, han agregado que en el caso de Ayamonte "la empresa siempre ha dicho que ese parador era inviable", de forma que dichas instalaciones "podría ver suspendida su actividad y hay intención de la empresa de concluir la actividad en dicho parador".
Precisan que "la empresa quiere cerrar siete paradores" y han agregado que hay unos 4.200 empleados como plantilla total, tras lo que apuntaron que estos trabajadores llevan tres años con los sueldos congelados, sin ningún tipo de subida.
Este expediente de regulación de empleo (ERE), que afecta tanto a los establecimientos como a los servicios centrales, se salda con el despido de 644 empleados, casi el 14% de la plantilla, y contempla modificaciones sustanciales en las condiciones de empleo de los trabajadores, esto es, reducción de horas, suspensión de la paga de Navidad o bajadas de salario.
El sindicato ha explicado en una nota que la compañía había apuntado en un comunicado que el objetivo de esta reestructuración es "adecuar la realidad del sector a la actual demanda para garantizar así la continuidad de Paradores de Turismo". Según la propia empresa "la situación financiera de la compañía es insostenible, y si no se tomaran estas medidas, en 2013 las pérdidas podrían alcanzar los 139 millones de euros".
En dicha misiva, la dirección de Paradores precisa que en 2012 la cadena "ha registrado un índice de ocupación del 52% frente al 70% que presentaba en 2007, fecha en la que comenzaron a registrarse las pérdidas más significativas en la historia de los Paradores Nacionales, 77 millones hasta 2011". A estas pérdidas se unen 30 millones con los que la cadena prevé cerrar el ejercicio de 2012.
La dirección de Paradores señala que realizará "todo el esfuerzo posible para aplicar un plan social que minimice los efectos de la medida", a lo que el presidente del comité intercentros de Paradores de Turismo, Enrique Sánchez, ha contestado que "tal y como ocurrió el pasado mayo con las negociaciones de un plan de viabilidad, la empresa no quiere negociar" y ha apuntado que "este es un intento de privatizar la empresa pública".
El próximo lunes 3 de diciembre se reúnen los responsables de UGT y CCOO con la dirección de la empresa para llegar a un acuerdo que "beneficie en lo posible a los trabajadores de esta cadena".
