MADRID, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las estaciones de servicio facturarán 37.000 millones de euros este año, lo que supone un incremento de 1,5% respecto al ejercicio anterior en un contexto de caída del consumo y de mantenimiento del precio de los carburantes por encima del nivel contabilizado en 2011, según un informe de la consultora DBK.
Pese a que los ingresos registrarán una tasa de variación positiva al cierre de este año, la tendencia a la baja del consumo de los hogares, el alto nivel de desempleo y la reducción de la demanda de transporte, tanto por parte de profesionales como de particulares, seguirán motivando un descenso de las ventas de carburantes a corto plazo.
En concreto, en los cinco primeros meses de este año la disminución se ha cifrado en el entorno del 6% respecto al mismo período del año anterior.
En 2011, las gasolineras facturaron 36.500 millones de euros, lo que se traduce en un incremento del 11% respecto al ejercicio anterior, como consecuencia del notable incremento de los precios que compensó la caída del consumo.
En este sentido, las ventas en volumen de gasolina y gasóleo a través de estaciones de servicio mantienen desde 2008 una trayectoria descendente, habiéndose acelerado la caída en los primeros meses de este año.
Así, las ventas de gasolina y gasóleo realizadas en estaciones de servicio cayeron un 4,2% en 2011, hasta los 22,74 millones de toneladas, intensificándose la tendencia a la baja de los últimos años.
Según DBK, el notable aumento de la cotización del petróleo motivó que el precio de los carburantes experimentara de nuevo un fuerte crecimiento en 2011, cifrado en el 13% en el caso de la gasolina sin plomo y del 18% en el del gasóleo de automoción.
La venta de carburantes representó el pasado año el 97% de los ingresos totales de las estaciones de servicio, correspondiendo el 72% a venta de gasóleo y el 25% a gasolina, tras registrar tasas de variación positiva ambos segmentos. Por su parte, el resto de ingresos, procedentes en su mayoría de ventas en tienda, mostraron un descenso del 3%.
La red española de estaciones de servicio estaba compuesta en 2011 por 9.800 puntos de venta, tras incrementarse un 1,3% respecto a la cifra del año anterior. El volumen de empleo generado se situó en torno a los 47.000 trabajadores, de forma que cada estación contaba con alrededor de 5 trabajadores.
Cerca del 80% de las estaciones forman parte de las redes de mayoristas de productos petrolíferos, ya sea en propiedad o en régimen de abanderamiento. Las estaciones con marca blanca o pertenecientes a cooperativas representan el 19% de la red nacional, correspondiendo el 3% a hipermercados y supermercados.
Destaca, según el informe, la concentración de la oferta en las cinco principales empresas vinculadas a grupos petrolíferos, a los que pertenece el 69% del total de estaciones de servicio. A su vez, los cinco principales operadores reunieron en 2011 el 73% del valor del mercado, mientras que los diez primeros alcanzaron una participación conjunta del 81,5%.
