La flor de sal marina será el nuevo regalo institucional que haga el Ayuntamiento de Cádiz

Regalo institucional del Ayuntamiento de Cádiz
EUROPA PRESS/AYUNTAMIENTO DE CÁDIZ
Actualizado: sábado, 23 julio 2016 14:09

CÁDIZ, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -

La flor de sal marina será el nuevo regalo institucional que entregará el Ayuntamiento de Cádiz a aquellas personas que así lo requiera el protocolo institucional como representantes y autoridades. El alcalde de Cádiz, José María González (Por Cádiz Sí se Puede), ha destacado que, con esta elección, "se quiere aprovechar la oportunidad que nos brindan las relaciones institucionales para hacer promoción de un producto de calidad y singular, como es la sal de Cádiz".

Según ha informado el Consistorio en una nota, González ha subrayado el carácter "artesanal" que trae consigo la recolección de la flor de sal y ha puesto en valor el modelo productivo, que lleva aparejado "un modelo sostenible con el medio ambiente que ha perdurado durante décadas en la bahía de Cádiz, la cual ha albergado más de 160 salinas marinas artesanales, hasta mediados del siglo XX".

La Flor de Sal Marina Virgen es el velo que se cría en la superficie del cristalizador. Se cosecha a mano al atardecer porque el relente de la noche precipita al fondo esta incipiente sal. Es la más fina y apreciada sal del mundo, según destaca el Ayuntamiento, que apunta que es baja en cloruro sódico (88-90 por ciento) y de escasa cristalización.

Para la distribución de este regalo se ha recurrido a la ONG Salarte, la única entidad privada que gestiona una Zona de Reserva en Andalucía. Esta organización fue fundada en 2012 para recuperar salinas abandonadas y potenciar la biodiversidad mediante custodia del territorio.

En concreto, la sal de la que se hará entrega a las distintas autoridades proviene de la Salina La Esperanza, gestionada por Salarte y la Cooperativa Salinas Artesanales Gaditanas durante 2015 con la consiguiente creación de empleo y conservación de la biodiversidad.

Solarte es una organización independiente de custodia del territorio, de naturaleza asociativa y sin ánimo de lucro formada por ambientólogos, técnicos e investigadores con el objetivo de recuperar, gestionar y poner en valor la marisma salinera. Para ello prestan servicios para el desarrollo de iniciativas científicas, sociales, económicas y culturales con objeto de reconstruir un territorio vivo que otorgue bienes y servicios, así como fije raíces.