Málaga.- Innova.- La UMA crea un Centro de Hidrogeología que investigará y asesorará sobre los recursos hídricos

Actualizado: lunes, 1 septiembre 2008 19:54

MÁLAGA, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Universidad de Málaga (UMA) ha creado el Centro de Hidrogeología (CEHIUMA), para dar respuesta a la demanda creciente de agua y a las necesidades científico-técnicas existentes, tanto de cantidad como de calidad, especialmente en el ámbito mediterráneo que permitirá asesorar sobre los recursos hídricos.

El centro estará integrado por un grupo de la UMA, con 20 años de experiencia en investigación, principalmente en aguas subterráneas. Asimismo, colaborará con el Instituto Geológico y Minero de España (IGME), un organismo público de Investigación con gran trayectoria en este campo; según informó la Universidad malagueña en un comunicado.

Desde el CEHIUMA se llevará a cabo investigación científica y asesoramiento técnico sobre recursos hídricos, gestión de acuíferos, abastecimientos urbanos, calidad y contaminación del agua, y aplicación de directivas europeas en esta materia.

Según explicó el responsable del CEHIUMA, Bartolomé Andreo, la provincia malagueña es una "tierra rica en acuíferos", es decir, en zonas del subsuelo con volúmenes de agua que pueden aprovecharse para el consumo humano, para regadío o para uso industrial. Dos problemas importantes a los que se están expuestos los recursos de agua son "la explotación excesiva y la contaminación", afirmó.

Sobre este tema, resaltó que la explotación incontrolada de acuíferos genera descensos del nivel freático, con el consiguiente agotamiento de manantiales o la afección a zonas húmedas. La utilización de abonos, el emplazamiento de residuos o la realización de actividades contaminantes y, en zonas costeras, la intrusión de agua marina, son algunos de los factores condicionantes del deterioro de la calidad.

PROYECTOS

Actualmente, el CEHIUMA está inmerso en un Proyecto de Excelencia de la Junta de Andalucía para conocer los recursos en un amplio sector de la provincia de Málaga y, así, estimar la cantidad de la que disponemos en caso de sequía. Además, otro de los objetivos es determinar la periodicidad de las sequías, para crear "planes preventivos de actuación", afirmó el responsable de la investigación.

Por otra parte, el centro participa en un proyecto de la UNESCO y en otro del Ministerio de Ciencia e Innovación recientemente aprobado, para investigar en acuíferos formados por rocas calizas. "Se trata --añadió Andreo-- de saber cómo se produce la entrada del agua de lluvia y la descarga por manantiales, para conocer el funcionamiento de los acuíferos y, en el futuro, planificar un aprovechamiento sostenible de los recursos hídricos".

Estos proyectos permiten a los expertos estimar la distribución del tan ansiado recurso y, también, tomar medidas para ponerla a salvo.

PROTECCIÓN DEL AGUA

La protección del agua es otro de los temas en los que trabaja el CEHIUMA en colaboración con el IGME, para la implementación de las directivas europeas en este campo. Con estos resultados será posible el diseño de mapas de vulnerabilidad a la contaminación y perímetros de protección de las captaciones de agua subterránea, exigidos por la Unión Europea.

Junto con la investigación científica y el asesoramiento técnico, otro gran objetivo del CEHIUMA es la formación de técnicos e investigadores. Por ello, todos los temas anteriores y otros relacionados con el agua son objeto del Máster Oficial de Postgrado en Recursos Hídricos y Medio Ambiente (RHYMA) que ha puesto en marcha la Universidad de Málaga, con la colaboración de la UNESCO, IGME, Ministerio y Consejería de Medio Ambiente; así como con empresas privadas.

Desde la Administración y la Unión Europea se está apostando por el estudio de los recursos para tener una gestión y previsión documentadas técnica y científicamente, pero "todavía queda mucho por hacer", resaltó el responsable del CEHIUMA.

No obstante, Andreo incidió en que "los consumidores también deben aportar su grano de arena, aunque algunos todavía siguen viendo muy de lejos un problema tan acuciante como es el del oro del siglo XXI: el agua".