Andalucía tardará dos trimestres más que España en entrar en recuperación económica, según Caixa Catalunya

Actualizado: lunes, 15 marzo 2010 18:40

SEVILLA, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -

La economía española se contraerá un 0,4 por ciento en 2010, aunque volverá a tasas positivas "en la segunda parte del año, sobre el tercer trimestre", mientras que Andalucía muestra un retraso en la entrada de la recuperación de "dos trimestres a lo más", según explicó el catedrático de Economía Aplicada Josep Oliver Alonso que presentó hoy la actualización del informe semestral sobre la economía española y el contexto internacional de Caixa Catalunya.

De esta manera, apuntó que "Andalucía representa el modelo español pero acentuado" e igual que tuvo "un proceso de crecimiento más intenso" ahora pasa por la misma situación de una manera "algo más acentuada".

Asimismo, el informe destaca que el consumo privado en España se estabilizará en 2010 con relación al pasado año. En el conjunto de la economía, el efecto arrastre del fuerte ajuste producido el pasado año condicionará una caída del Producto Interior Bruto (PIB) un 0,4 por ciento, lo que supone un 3,2 por ciento pro debajo de la registro en 2009.

Esta evolución responderá, según explica el estudio, "en gran medida" a la finalización del ajuste de la economía a un nuevo escenario de menor producto y empleo potencial, que está comportando una notable caída de la actividad en sectores como la construcción y que habrá supuesto la destrucción de un total de dos millones de puestos de trabajo en tres años.

A este elemento hay que sumar la mejoría gradual en las economías del entorno europeo, principales socios comerciales de España, destacando el impulso de Alemania y Francia ya desde el segundo trimestre de 2009.

Por último, un tercer factor que está favoreciendo la transición a un escenario de crecimiento es el efecto compensatorio de las medidas de estímulo monetario y fiscal adoptadas durante el pasado año, que han supuesto, por un lado, la reducción de la carga financiera por la bajada de tipos de interés y, por otro lado, la rebaja de la presión fiscal y el incremento de la demanda pública.

CAUSAS

En el cambio de fase cíclica que ha tenido lugar desde finales de 2007, la construcción ha mostrado un perfil adelantado con relación al resto de actividades, siendo la primera en iniciar el ajuste a un nuevo escenario económico y financiero. La Formación Bruta de Capital Fijo (FBCF) en este sector se contrajo un 5,5 por ciento en 2008, un 11,2 por ciento en 2009 y la previsión sitúa la caída para 2010 en el 6,5%. En términos de empleo, el retorno a valores relativos de largo plazo (en torno al 10% del total de ocupación) comportará la destrucción acumulada de aproximadamente 1 millón de puestos de trabajo, más de la mitad del total previsto para el conjunto de la economía.

El informe destaca que la pérdida de ingresos laborales de los hogares ha sido uno de los factores explicativos fundamentales de la fuerte contracción del gasto de las familias. La ocupación, tras descender un 0,5 por ciento en 2008 y un 6,8 por ciento en 2009, caería un 1,6 por ciento adicional en 2010.

Esta menor intensidad en la destrucción de puestos de trabajo, que concluirá en la parte final de año, junto a la caída de la población activa, suavizará el aumento de la tasa de paro en 2010, siete décimas hasta el 18,7 por ciento. Este escenario frenará el descenso del consumo privado, que registrará una variación del 0,0 por ciento en 2010 frente al 4,9 por ciento de caída de 2009.

Un segundo factor de relevancia en el descenso del gasto de las familias durante el último año ha sido el incremento de la tasa de ahorro, impulsada al alza por motivo precaución ante la incertidumbre asociada a la crisis, desde el 13,0 por ciento en 2008 al 17,6 por ciento estimado para 2009.

La recuperación de la confianza, tal y como apunta el aumento trimestral del consumo privado en el cuarto trimestre de 2009, permitirá frenar esta tendencia y anulará el drenaje sobre el dinamismo del consumo de las familias. En este escenario, el consumo de las familias volverá a comportarse en línea con la renta disponible, que en 2010 contará todavía con ciertos estímulos fiscales y monetarios, si bien la subida del IVA en verano podría limitar su impacto positivo.

El sector privado en su conjunto ha experimentado un ajuste sin precedentes en su posición financiera, con un incremento notable de la tasa de ahorro y una caída igualmente significativa de la inversión. En el ámbito empresarial, el máximo exponente de esta corrección ha sido el hundimiento de la FBCF en bienes de equipo y en otros productos, que, después de descender un 2,7 por ciento en 2008, experimentó en 2009 una caída brusca del 21,0 por ciento, resultado del colapso de la demanda interna y del comercio internacional. Para 2010 la situación presenta un perfil menos negativo, con un retroceso estimado del 1,0 por ciento.

Ante el cambio experimentado en las cuentas del sector privado, que han pasado de ser demandantes netos de fondos por un valor de casi el 14 por ciento del PIB en 2007 a tener capacidad de financiación en 2009, el sector público ha respondido con un incremento muy sustancial del déficit.

El impacto de los estabilizadores automáticos, de las medidas de estímulo y el descenso estructural de la actividad potencial, llevarán, según previsiones de la Comisión Europea, a un saldo presupuestario negativo anual del diez por ciento del PIB en el trienio 2009-2011. Este deterioro en las cuentas públicas requiere un ajuste para frenar el incremento de la deuda, lo que se traducirá ya en 2010 en la retirada parcial de estímulos, la subida del IVA y un aumento más contenido del consumo público, un 1,4 por ciento respecto al 3,8 por ciento de 2009 y el 5,5 por ciento de 2008.

El resultado del comportamiento contracíclico del sector público es que la mejoría en la posición exterior de la economía española será contenida con relación a lo que cabría esperar de los ajustes en el sector privado. La demanda externa continuará aportando positivamente en 2010, aunque de forma más moderada, 0,3 puntos con relación a los 2,7 puntos de 2009 y a los 1,4 puntos de 2008, como consecuencia de un mayor incremento de las exportaciones de bienes y servicios, un 4,8 por ciento, que de las importaciones, un 3,2 por ciento.