SEVILLA, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los alcaldes de los municipios sevillanos de Lebrija y Las Cabezas de San Juan, María José Fernández (PSOE) y Francisco Toajas (PSOE), respectivamente, han manifestado este miércoles su apoyo al llamamiento realizado por UGT, en demanda de una auditoría que esclarezca si ya está o no amortizada la inversión privada por la cual desde hace más de 40 años pesa un peaje para el uso de la autovía AP-4, que enlaza Cádiz y Sevilla y cuya liberalización se demanda.
A raíz de la propuesta de UGT de que los conductores soliciten siempre el comprobante de pago de la autopista con el que constatar el uso de la vía y "exigir" una auditoria a la misma, María José Fernández ha afirmado, en declaraciones a Europa Press, que apoya toda medida encaminada a solicitar el rescate de la AP-4, de "manera inmediata por razones económicas, de seguridad y de trato igualitario". Y es que la carretera alternativa a la autovía de peaje, la N-IV, está muy saturada y su historial de siniestralidad ha crecido intensamente en los últimos años.
"Pienso que después de tantos años esta carretera estará amortizada, pero la cuestión es que es una infraestructura básica con un coste elevadísimo para los ciudadanos que transitan por ella para cuestiones tan básicas como trabajo, estudio o salud", ha apuntado la regidora.
UN "CÁLCULO REAL"
Por su parte, Francisco Toajas ha indicado a Europa Press que es necesaria una auditoría para conocer el "cálculo real" de los ingresos que acumula la concesionaria y si la autopista está amortizada; aunque difiere de que la medida propuesta por UGT, para que se solicite siempre el comprobante en el peaje, sea "eficaz".
"La propuesta de UGT tiene el valor de mantener la idea de que está amortizada. No sé que previsión se puede hacer pidiendo el ticket durante unos días de los años anteriores, pero sí que hay que incidir en la idea de una auditoría al Ministerio de Fomento para ver si hay motivos para prorrogar la concesión o no", ha expresado, pues no es hasta 2019 cuando finaliza la vigente prórroga de la concesión que regula la explotación privada de la autovía.
El regidor lebrijano cree que la autopista está ya "amortizada" debido a que después de dos prórrogas, "se hace difícil pensar que vayamos por el doble del tiempo y no lo esté".
DOS PRÓRROGAS DESDE 1973
La autopista se inauguró en marzo de 1973, con una concesión de explotación de 20 años, por lo que dicha explotación debía finalizar en 1993, fecha que se prorrogó en el gobierno de Adolfo Suarez seis años más, que posteriormente Felipe González también prorrogó, al que se sumó José María Aznar, quien lo prorrogó 13 años mas hasta 2019.
Por ello, UGT Sevilla ha pedido a todos los usuarios de la autopista que pidan el ticket comprobante del pago de la autopista a fin de que quede "una constancia fehaciente" de los vehículos que utilizan esta vía y de lo que recauda su empresa "explotadora" del servicio para poder "exigir" una auditoria a la misma.
