ZARAGOZA, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Fomento, José Blanco, agradeció hoy, en el marco del Congreso de la Empresa Familiar, a los sindicatos y al presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, presente en dicho encuentro, al que se dirigió como "querido Gerardo", la "ausencia de conflictividad social" en España en el actual contexto de crisis, al tiempo que animó a buscar fórmulas para incrementar la productividad de las empresas y reordenar el trabajo.
Además, Blanco animó hoy a "compartir riesgos" entre el Grupo Fomento, el sector privado y la banca para impulsar las obras públicas y el transporte. El ministro afirmó que el Gobierno de España está "trabajando intensamente" para aprobar un Plan de Colaboración Público-Privada.
Blanco intervino hoy en la última jornada del XII Congreso Nacional de la Empresa Familiar, que se clausuró hoy en el Palacio de Congresos de la Expo, donde apostó por rubricar una "alianza" para "potenciar el transporte limpio", dentro del proceso de actualización del Plan Estatal de Infraestructuras de Transporte (PEIT), que se centrará en la movilidad urbana y metropolitana, el transporte de mercancías por ferrocarril, la colaboración público-privada y la modernización de infraestructuras.
Todo ello debe ir encaminado a conseguir una red de transporte limpia, eficiente y capaz de impulsar el crecimiento económico de las empresas españolas "en consonancia con el futuro que se avecina", afirmó el titular de Fomento, quien reiteró el interés del Ejecutivo central por aprobar la Ley de Economía Sostenible.
El ministro expresó que "vivimos un momento de cambio" porque la crisis económica es "mucho más fuerte" que todas las que se han producido desde la II Guerra Mundial y que está caracterizada por la caída del consumo y la inversión, el aumento "voraz" del desempleo, los problemas en el sector bancario, tras lo que señaló que "estamos todos involucrados".
El titular de Fomento dijo que "la dificultad nos golpea, pero no puede noquearnos hasta el punto de dejarnos quietos, sin ideas" y, al contrario, señaló que es preciso tomar decisiones para que esta crisis "no se repita por las mismas causas". Blanco estimó que un factor determinante de la crisis financiera fue la ausencia de mecanismos de control junto con "el abuso de la especulación" y expresó que, cuando comenzó la recesión, la intervención pública, "tan cuestionada por el capitalismo global" se reveló como "imprescindible".
"Algo está pasando", manifestó Blanco, quien comparó el momento histórico con la caída del Muro de Berlín, cuando se derrumbó el modelo socioeconómico del entonces denominado socialismo real. En este contexto "nadie tiene un remedio que pueda solucionar --el problema-- en todos los escenarios a la vez" porque "nadie tiene una receta mágica".
Ahora "es el momento de estar unidos" y de "no quedarse sentado a ver qué pasa", continuó José Blanco, quien recomendó abordar "una estrategia global" que permita no volver a caer nunca en los mismos problemas y comentó que el G-20 se está convirtiendo en el ámbito de decisión más importante a nivel global.
"España ha mantenido su visión del mundo desde 2004", una visión multilateralista, declaró Blanco aludiendo a la lucha contra el unilateralismo que propugnó el anterior presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y que constituía un fundamento de la política 'neocon'. El Gobierno de España aprovechará "esta oportunidad", la de formar parte del G-20, prometió Blanco.
Según Blanco, el empresariado español es experto en las energías renovables y el transporte sostenible. El ministro de Fomento indicó que, durante el periodo de Presidencia española de turno de la Unión Europea (UE), España estará "en una posición de liderazgo" para dialogar sobre el cambio climático, la crisis global y el papel de la UE en el mundo.
COMPETITIVIDAD
El ministro José Blanco agregó que el sector inmobiliario llegó a absorber altos porcentajes de inversión, que iban "adonde no tenían que ir" y además no generaba empleo a largo plazo, lo que llevó a una situación "insostenible" que ha dejado "una marca imborrable" en muchos ayuntamientos españoles. Así, "la burbuja estalló" implicando a las pymes, lo que generó un alto desempleo.
"Fallido el mercado, el Gobierno se ve obligado a responder" en aquel momento, apuntó José Blanco, quien propuso combinar las políticas de competitividad empresarial con los derechos de los trabajadores "por conservar la ausencia de conflictividad social a pesar del momento económico", lo que agradeció a la patronal y los sindicatos.
El ministro de Fomento defendió las nuevas líneas de ayuda a pymes del Instituto de Crédito Oficial (ICO) y el Plan E. Ahora el Ministerio de Fomento está invirtiendo "más que nunca" y aludió a los Presupuestos de Fomento, que en 2010 superarán los 19.000 millones de euros, la mayor inversión en infraestructuras en la Historia de España.
Los socialistas "no estamos dispuestos a volver al pasado, a crecer con las viejas fórmulas", aseveró Blanco, quien expresó que es necesario que el nuevo modelo económico se base en el conocimiento, el cambio energético, la economía sostenible, que el crédito se asigne de forma eficiente a las empresas.
Según el ministro, "debemos ayudar a emprender", de ahí que el Gobierno central del socialista José Luis Rodríguez Zapatero haya sido el primero en bajar el impuesto de sociedades y el año próximo vaya a ser el primero en bajar más impuestos a las pymes que mantengan el empleo.
El Gobierno pretende reducir las cargas administrativas de las empresas un 30 por ciento para 2012, aunque la reforma más significativa es la eliminación de "las barreras de entrada y salida" en los mercados de servicios de la UE para pasar "de un modelo antiguo que consideraba al emprendedor como un sospechoso de incumplir la norma a un modelo nuevo que establezca una regla general de libertad de acceso al emprendedor", siempre "sin menoscabo de la calidad de los servicios".
Blanco aplaudió "al empresario que asume riesgos, que innova, que crea y que pone en valor nuestros recursos", un tipo de empresario que encontrará en el Gobierno "un aliado estratégico" porque "creando empresarios llegamos al mejor camino para crear empleo", al tiempo que apostó por mejorar las redes de transporte terrestre. Blanco recordó que el ministerio de Fomento está realizando importantes inversiones, por lo que también está ayudando a crear empleo.
PREOCUPACIÓN DE LOS EMPRESARIOS
El ministro fue presentado en el acto por el presidente del Instituto de la Empresa Familiar, Simón Pedro Barceló, quien le transmitió la preocupación de los empresarios por la competitividad y opinó que el incremento del gasto social, el apoyo a la inversión municipal y la reordenación del sistema bancario "eran necesarios", pero echó de menos "una apuesta más decidida por otras políticas que deben ayudar a la competitividad española".
Además, pidió "que se reduzca la crispación" y alertó de que parte de la crispación se dirige contra la figura de los empresarios, que "no hemos recibido el reconocimiento que merecíamos".
Barceló proclamó que los empresarios no son "un problema" sino parte de la solución y reclamó apoyo del Gobierno de España. El presidente de las empresas familiares españolas apostó por recuperar valores como el espíritu de equipio, la honradez, la austeridad, que deben presidir "la educación, la política, las Administraciones y toda la sociedad".
