BRUSELAS/OVIEDO, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
La comisaria de Pesca, Maria Damanaki, ha confirmado este martes la sanción contra España por haber casi duplicado su cuota de caballa en el mar Cantábrico en 2010. La pena consisten en reducir la cuota española en 40.000 toneladas, el doble de lo pescado en exceso, durante los próximos 5 años.
"Somos conscientes de la crisis y la situación en España, pero hemos tenido que hacerlo", ha dicho Damanaki en rueda de prensa para presentar el nuevo sistema de sanciones de la UE por pesca ilegal, que se aplica por primera vez en este caso español.
"Han superado su cuota de caballa en el mar Cantábrico en casi 20.000 toneladas, el 80% del total. Casi han duplicado su cuota. Esto fue bastante grave", ha señalado la comisaria de Pesca.
La reducción se aplicará en cinco años porque si se hiciera efectiva de una vez "habría que cerrar el caladero totalmente" y los científicos consideran que la situación de la caballa no es tan grave como para justificar esta medida, ha insistido Damanaki.
"Hemos intentado hacer lo mejor en este caso pero finalmente, y lo siento, tendrán que reducir su cuota", ha dicho la comisaria de Pesca.
Además, en estos momentos se está investigando a 70 barcos, procedentes de 5 Estados miembros y 11 países de fuera de la UE, acusados de haber superado su cuota de pesca en aguas internacionales. Pero Damanaki no ha querido desvelar qué países de la UE están afectados hasta que no concluyan las pesquisas.
Las nuevas normas sobre control de la pesca dan poderes a la Comisión para llevar a cabo investigaciones independientes en los Estados miembros y suspender o retirar ayudas a la pesca y reducir las cuotas a aquellos que consientan la pesca ilegal. Estos son los poderes que Bruselas ha usado por primera vez para sancionar a España por la sobrepesca de caballa en el mar Cantábrico.
También se crea un sistema de 'carné por puntos' para los pescadores que puede acabar en la pérdida de licencia o sanciones de hasta 300.000 euros por infracciones graves.
Este nuevo régimen asegura, según la Comisión, la trazabilidad en toda la cadena, desde la captura del pescado hasta que el consumidor lo adquiere. Las autoridades de los Estados miembros pueden detectar irregularidades en cualquier punto de la cadena comercial y "tirar del hilo" hasta identificar a quienes las han cometido. Las inspecciones se realizarán del mismo modo en toda Europa.
