TOLEDO, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
El sindicato CCOO ha pedido al Gobierno regional que "ponga coto a la proliferación" de puntos de venta de gasolina no atendidos en Castilla-La Mancha, pues desde el año 2010 este tipo de establecimientos han provocado la destrucción de 600 empleos en la región.
Así lo han puesto de manifiesto el secretario regional de Industria de CCOO, Ángel León, que acompañado de los responsables regionales del sector gasolineras del sindicato, Margarita Mena y Laudelino Martínez, ha explicado que desde el año 2010 se han abierto en la región un total de 59 establecimientos de este tipo.
Tras precisar que son las propias comunidades autónomas las que autorizan la apertura de este tipo de centros, León ha manifestado que CCOO ya ha presentado 18 denuncias ante la Consejería de Sanidad pues consideran que no cumplen la normativa legal vigente.
Además, ha alertado de que en este tipo de gasolineras existe un riesgo potencial en materia de seguridad, pues se mueven grandes cantidades de materia peligrosas sin la presencia de nadie que pueda controlar las ventas ni atender de forma adecuada a los consumidores.
En estos establecimientos, ha proseguido el responsable de Industria de CCOO Castilla-La Mancha, no se atiende a las necesidades de las personas con discapacidad, no existen hojas de reclamación ni facturas con garantías.
Es por ello que han pedido la creación de una mesa con "carácter de urgencia", en la que Junta, patronal y sindicatos analicen y tomen las medidas necesarias para anular los riesgos que comportan las llamadas estaciones de servicio "desatendidas".
De igual modo, han reclamado un plan de inspecciones con carácter "urgente" para tener elementos de contraste entre estaciones tradicionales y desatendidas y así poder detectar las irregularidades y endurecer los requisitos de control para evitar la posibilidad de competencia desleal.
