Colau ha confiado en que los congresistas disfruten su estancia pese a los "inconvenientes" de transporte
BARCELONA, 21 (EUROPA PRESS)
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha afirmado este domingo que el Ayuntamiento pondrá todos sus recursos, en colaboración con la GSMA --asociación que agrupa la industria móvil mundial e impulsa el Mobile World Congress (MWC)--, para "garantizar una alternativa de mobilidad que minimice las molestias a los ciudadanos y a los participantes en el congreso".
En un discurso previo a una cena en el Liceu que da el pistoletazo de salida institucional al Mobile World Congress (GSMA) con 160 invitados entre altos representantes del mundo político y empresarial, ha afirmado que, desde el Consistorio, han negociado "hasta el último momento con los sindicatos ofreciendo una propuesta razonable", pero no ha sido posible desconvocar la huelga --de metro y autobuses en días alternos de lunes a jueves--.
Con todo, ha confiado en que los congresistas disfruten de Barcelona y pasen una gran estancia pese a los "inconvenientes" de transporte que puedan sufrir, y ha augurado que la presente edición del MWC será la mejor desde que el evento se empezó a celebrar en la capital catalana hace 10 años.
BENEFICIOS ECONÓMICOS Y SOCIALES
Colau ha afirmado que acoger el MWC es una gran oportunidad para Barcelona por "su impacto económico y proyección internacional", y para todos los ciudadanos por su acercamiento social y compromiso medioambiental.
En esta línea, ha instado a usar la tecnología para reducir las desigualdades sociales, combatir el cambio climático y hacer sociedades más transparentes y democráticas.
Colau, que al ser la alcaldesa de Barcelona es además la presidenta de la Fundación Barcelona Mobile World Capital, ha tenido un lugar destacado en la mesa presidencial, que era ovalada y estaba formada por 20 personas.
El Rey Felipe VI estaba sentado en el centro de uno de los lados largos del óvalo, con el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, a su derecha, y el director general de GSMA, Mats Granryd, a su izquierda; enfrente del monarca estaba el ministro de Industria, José Manuel Soria, con Colau a su derecha y la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, a su izquierda.
La cena también ha contado con la asistencia del conseller de Exteriores de la Generalitat, Raül Romeva; el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls; la alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat, Núria Marín, y la delegada del Gobierno en Catalunya, Llanos de Luna.
Asimismo, han acudido el consejero delegado de la GSMA, John Hoffman; el presidente de Fira de Barcelona, Josep Lluís Bonet; el director general de Fira de Barcelona, Constantí Serrallonga, y el director general del Liceu, Roger Guasch.
Otros invitados han sido el director general de la Barcelona Mobile World Capital, Aleix Valls; el presidente de Turismo de Barcelona, Joan Gaspart; el presidente de Abertis y del Carec --consejo económico asesor del Govern--, Salvador Alemany; el presidente de Fomento del Trabajo, Joaquim Gay de Montellà, y el de Pimec, Josep González; el presidente de Telefónica, César Alierta; el consejero delegado de Vodafone, Vittorio Colao; el vicepresidente de CaixaBank, Antonio Massanell, y el presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, entre otros.
VÍTORES Y SILBIDOS A LA SALIDA
Al igual que a la entrada --hacia las 19.30 horas--, tras la cena --sobre las 22.20 horas-- el monarca ha sido recibido en el exterior del Liceu por una mezcla de gritos de 'Viva España' y 'Viva el Rey' y de silbidos.
Ha salido junto al presidente de la Generalitat, pero hablando con el ministro Soria, mientras que Puigdemont se ha quedado después charlando unos minutos con Colau en el interior del teatro lírico catalán.
