BARCELONA, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
Govern y ERC han protagonizado este miércoles un cruce de críticas sobre el papel que CiU y los republicanos tienen en la comisión de investigación sobre el caso Pujol y también en lo relativo a los sueldos y remuneraciones de los altos cargos.
En una pregunta del diputado de ERC en el Parlament, Oriol Amorós, ha acusado al Govern de querer "taparse las vergüenzas" al no votar a favor de la comparecencia en la comisión de investigación de los expresidentes José María Aznar (PP) y Felipe González (PSOE).
Sin embargo, el conseller de Presidencia, Francesc Homs, le ha replicado que, si aplicara su mismo criterio, no sabe por qué ERC vetó la comparecencia del exvicepresidente de la Generalitat Josep Lluís Carod-Rovira, y más cuando ha asegurado tener información "sobre contrataciones relativas a otras épocas".
Según Amorós, si ERC y CiU quieren hacer "un gran camino juntos" debe ser un sendero nuevo y limpio de corrupción.
En relación a otra pregunta sobre sueldos y remuneraciones de altos cargos, el diputado de ERC Sergi Sabrià ha acusado al Govern de incumplir sus compromisos con los trabajadores de la administración y los interinos, lo que la vicepresidenta de la Generaliat, Joana Ortega, ha negado.
Para Ortega, han tenido que implementar decisiones difíciles para garantizar la sostenibilidad de la administración, el Estado del Bienestar y hacer frente a las deudas y a un déficit creado por un Govern del que formaba parte ERC.
También ha reivindicado que, en las medidas que han aplicado, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, los consellers y los altos cargos son los que han sufrido una mayor pérdida de poder adquisitivo, y ha invitado a los republicanos a apoyar los presupuestos de 2015 y hacer posible que los funcionarios recuperen la paga extraordinaria.
Las críticas entre ambas partes llegan después de la conferencia del martes del presidente de la Generalitat, Artur Mas, en la que propuso crear una lista única soberanista con partidos, expertos y sociedad civil tras el 9N, dejando en manos de ERC parte de la responsabilidad para que esto salga adelante.
