Disminuyen los que trabajan y los que lo hacen de manera regular
BARCELONA, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
La irregularidad entre las personas inmigrantes en Catalunya ha crecido en 2017 hasta el 54,6%, lo que supone un aumento de 7,5 puntos porcentuales respecto al año anterior, cuando se situó en el 47,1%, según los datos presentados este lunes por el Centro de Información para Trabajadores Extranjeros (Cite) de CC.OO. de Catalunya.
Para el director del Cite, Carles Bertran, este aumento se debe a las dificultades que tienen los inmigrantes en renovar sus autorizaciones de regularidad y acceder a ellas cuando llegan al país.
Ha enfatizado que estas trabas son una de las consecuencias de la crisis económica, ya que ésta ha complicado el mantenimiento de los requisitos necesarios para que los trámites sean aprobados, como por ejemplo la falta de un contrato laboral o no llegar a las cotizaciones mínimas a la Seguridad Social.
Es por ello que ha pedido que se flexibilicen los trámites para acceder y renovar la regularidad de estas personas, sobre todo, en sectores como el doméstico, con unas características propias que dificultan todavía más la aprobación de estos trámites.
Esta situación afecta levemente más a los hombres inmigrantes (58%) que a las mujeres (52%), puesto que son ellos los que trabajaban en los sectores más afectados por la crisis económica, como la construcción y la industria, y en los que el paro aumentó más.
Los datos recogidos por el Cite, que su director señala que no son extrapolables a toda la comunidad inmigrante pero permiten definir las tendencias que se producen en ella, también señalan que los trabajadores inmigrantes han pasado del 47,3% en 2016 al 45,9% en 2017.
DESDE HACE SEIS AÑOS
Bertran ha enfatizado que el aumento de personas inmigrantes que se quedan sin empleo se ha ido produciendo de manera sostenida en los últimos seis años, por lo que se ha pasado del 46,1% en 2012 hasta el 54,1% en 2017, y que ha afectado también un poco más a los hombres (58%) que a las mujeres (51%).
Asimismo, los trabajadores inmigrantes que lo hacen de manera irregular han aumentado hasta el 58,7% durante el año pasado, cuando en 2016 fue del 55,1%, situación que afecta en especial al servicio doméstico, que representa casi la mitad del total de trabajo irregular y en el que están empleadas mayoritariamente mujeres.
Como solución a esta situación, el secretario de Política Territorial, Acción Social y Migraciones de CC.OO. de Catalunya, Toni Mora, ha sostenido que España debe ratificar un convenio internacional de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), como ya lo han hecho otros países europeos como Alemania, Italia y Bélgica, ya que permitiría mejorar la protección de los trabajadores y acceder a algunos derechos fundamentales, como el derecho al paro y al desistimiento voluntario.
Para la ratificación del convenio, Mora ha explicado que éste debe ser aprobado por el Congreso de los Diputados, y ha informado de que el sindicato prevé sumar apoyos para conseguirlo a través de la "confluencia" de administraciones como el Ayuntamiento de Barcelona y el Parlament, y organizaciones de trabajadoras del sector como Las Libélulas y Mujeres Pa'lante.
