Pigem considera que su caso se ha "instrumentalizado" por la situación en Catalunya

Pleno del CGPJ (Archivo)
Foto: Europa Press

En su carta a Lesmes dice que no ha hecho nada irregular y se ve víctima de una campaña

   MADRID, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -

   La hasta este sábado vocal de CiU en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) Mercè Pigem asegura en la carta donde comunica su cese al presidente, Carlos Lesmes, que su caso se ha instrumentalizado por la situación en Catalunya y que, pese a no cometer ninguna irregularidad, ha sido víctima de una campaña "amplificada con ensañamiento" por los medios de comunicación.

   En la misiva reconoce que el 15 de noviembre, en un control en la aduana de salida de Andorra, declaró ante la Guardia Civil ser portadora de un dinero --cuya cantidad no especifica en la carta pero que según lo publicado ascendía a 9.500 euros-- que le había regalado su madre, que tiene su residencia oficial en el Principado de Andorra.

   "No se levantó acta alguna sobre mí porque los hechos no suponen ninguna irregularidad, aunque su apariencia es indudable que era susceptible de ser instrumentalizada, como así ha sido, siendo filtrados a la opinión pública en el trasfondo del grave enfrentamiento político con motivo de la situación en Catalunya", añade el documento.

   Pigem continúa señalando que "las insidias interesadamente promovidas, la publicación de afirmaciones sesgadas y su promoción", dirigidas a manchar su honorabilidad --dice--, condujeron a que en su encuentro con Lesmes éste le solicitara que renunciara al cargo.

SENTIMIENTOS ENCONTRADOS

   "Me enfrento a una situación muy difícil, con sentimientos encontrados", señala la letrada, que añade que la conciencia de que no hay irregular en su actuación --"como se reconoce por el propio Presidente del CGPJ, el apoyo de cuantos conocen la trayectoria personal, profesional y política, y el reconocimiento" que se le expresa a su trabajo en el Consejo-- le llevarían "sin ninguna duda" a mantenerse en el puesto.

   Añade que no quiere dar pábulo a que su salida "pudiera interpretarse en el sentido de dar la razón a las descalificaciones y especulaciones" que se han vertido sobre ella.

   No obstante, asume que debe gestionar la situación, "amplificada con ensañamiento por los medios, tratando de generar el menor daño posible" por parte de ella a la institución a la que hasta ahora pertenecía.

   "Me duele enormemente que se haya solicitado mi renuncia, pero comprendo también el recelo que puede provocar la utilización de esta situación para dañar una vez más la confianza de la ciudadanía en una institución que ya es frágil en este sentido", manifiesta.

   Dice también que, al verse muy afectada por el "descrédito" al que se le está sometiendo, no se siente capaz de seguir tomando las decisiones a las que le obliga su cargo, pensando que "pueden ser castigadas".

    "La campaña que padezco me ha hecho demasiado frágil para ejercer una función en la que lo único que debe primar es el interés general --apunta Pigem en la carta-. Mis decisiones no pueden verse mediatizadas por el temor de que no sean" convenientes" y así evitar que se reiteren una y otra vez las descalificaciones a que estoy siendo sometida".

   Dicha situación, a su juicio, sería mala tanto para el buen gobierno de los jueces como para los ciudadanos, para el Consejo, para su formación política y para sí misma: "Todo ello me lleva, con gran pesar y tras una profunda reflexión, a presentar mi dimisión como Vocal del Consejo General de Poder Judicial".

Leer más acerca de: