La policía local encabeza el gasto municipal por habitante en la provincia de Barcelona

Actualizado: lunes, 24 octubre 2016 13:14

La cifra de delitos en los 59 municipios estudiados es de 54,8 por cada 1.000 habitantes y sigue a la baja

BARCELONA, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -

El gasto corriente de los ayuntamientos en el servicio de policía local fue de 77,4 euros por habitante en 2015 en los 59 municipios de la provincia de Barcelona analizados en un informe promovido por la Diputación de Barcelona, que concluye que es el servicio que al que se destina más gasto por habitante.

Según el análisis de la XI edición del Círculo de Comparación Intermunicipal de Policía Local, centrado en el servicio de policía local en 59 municipios de la provincia de Barcelona, el gasto por habitante destinado a financiar a las policías locales supera el gasto destinado a Cultura, que es de 76,2 euros por habitante; Residuos, de 59,4 euros; Servicios Sociales, de 53,4 y guarderías, de 28,7.

Si se tiene en cuenta la evolución en los últimos diez años de este gasto, entre 2005 y 2009 se observó un esfuerzo importante para dotar de recursos a las policías locales, con un 31% de aumento, pero con la crisis económica hubo un ajuste en 2012, un gasto que no se recuperó hasta 2013.

Estos datos se han dado a conocer este lunes en el marco de unas jornadas celebras en Barcelona en las que ha asistido el conseller de Interior, Jordi Jané, y el diputado delegado de Hacienda, Recursos Humanos, Procesos y Sociedad de la Información del ente, Joan Carles Garcia.

A diferencia de otros servicios locales, prosigue el estudio, los cambios en la coyuntura económica no han comportado grandes cambios en el gasto en policía, lo que según el estudio demuestra que "la seguridad sigue siendo una de las políticas estratégicas".

En el documentado se ha estudiado si los municipios más grandes tienen proporcionalmente más incidencias por cada 1.000 habitantes que los pequeños, y se constata que las ciudades grandes "presentan más concentración de actividades ilícitas a causa del efecto capitalidad y la consecuente población flotante que atraen".

Al analizar si el grado de conflictividad está asociado a la renta per cápita de los municipios, las principales conclusiones son que la renta no está relacionada con el volumen de incidentes de tráfico ni hay una asociación lineal con los delitos en general, pero en las poblaciones donde los ingresos son más altos, el número de detenidos es bajo en comparación con la media, mientras que en los entornos desfavorecidos tienden a registrarse más detenidos.

Otro punto estudiado es sobre el tamaño de las plantillas y los ámbitos de actuación, y una de las constataciones es que a medida que aumentan las plantillas crecen las actuaciones de carácter asistencial y administrativo, y en este punto concluyen que los municipios con plantillas más amplias no obtienen resultados "significativamente diferentes del resto".

INDICADORES

La cifra de delitos y faltas en estos 59 municipios de Barcelona es de 54,8 por cada 1.000 habitantes y registra una tendencia a la baja desde 2009 --de 2006 a 2009 subió un 60%--, solo interrumpida por 2012.

El número de detenidos, 4,2 por cada 1.000 habitantes, disminuye con más fuerza que el número de delitos y faltas.

Los accidentes de tráfico en general --7,1 por cada 1.000 habitantes-- y los accidentes con víctimas --2,8 por cada 1.000 habitantes-- aumentan respecto al año anterior, lo que confirma el "tímido repunte observado el 2014", mientras que el porcentaje de víctimas mortales o grave se mantiene estable.

En la misma línea, la cifra de denuncias de tráfico no ha dejado de reducirse en estos municipios desde 2006, situándose en 2015 en los 282 por cada 1.000 habitantes, primero a un ritmo acelerado y más lentamente en los últimos años.

En 2015, por primera vez, disminuyó el porcentaje de denuncias graves y muy graves sobre el total de denuncias, siendo el 28,8%; la mitad de las denuncias por este tema que imponen las policías locales proceden de las zonas del control horario de pago.

La ratio de policías por cada 1.000 habitantes en estas poblaciones es de 1,4, similar a las dotaciones de policías locales en Catalunya --1,45--, pero con la crisis económica y la escasa entrada de nuevos policías ha aumentado la media de edad en cinco años entre 2010 y 2015, de los 41 a los 46 años.

Por primera vez desde 2007 vuelven a aumentar el porcentaje de horas extras sobre las horas del convenio, y a su vez crecieron las horas de baja, siendo las policías locales el servicio con mayor porcentaje de horas de baja de los ayuntamientos estudiados.

El número de accidentes laborales por cada 100 trabajadores continúa siendo alta, según el estudio, situándose en los 24,6, pero se ha ido reduciendo en los últimos dos años estudiados, 2014 y 2015.