BARCELONA, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
El sindicato de los Mossos d'Esquadra SPC han negado este jueves que los cuatro agentes imputados por el caso Raval que no pudieron hacerse la prueba de tóxicos al tener el pelo muy corto y el vello rasurado hayan seguido "ninguna maniobra para esquivar las pruebas".
En un comunicado, el sindicato ha asegurado que estos cuatro agentes llevan esta estética desde antes de que se iniciara el proceso judicial, la han mantenido "desde el primer día" y han mostrado en todo momento su predisposición para realizar dicha prueba.
Ha destacado que, de los 10 imputados en el caso de la muerte del empresario del Raval Juan Andrés Benítez tras ser reducido por los Mossos, seis se han practicado las pruebas de tóxicos, tal y como pidió la juez que lleva el caso, Eva Moltó.
La prueba de tóxicos necesita de un mínimo de longitud del pelo que garantice la eficacia del análisis, y fueron los propios forenses que determinaron que los cuatro agentes no cumplían con el mínimo y aconsejaron no realizar la prueba "pese a la predisposición de los agentes, que ofrecieron los de otras partes del cuerpo", indica el sindicato.
"Nuestros defendidos no tienen nada que ocultar, estaban y están dispuestos a hacerse la prueba, una vez transcurrido el tiempo necesario para que el pelo crezca lo suficiente para llevar a cabo la prueba", han asegurado.
