MELILLA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
Melilla lleva más de una semana sin poder importar materiales de construcción como ladrillos, grava y arena después de que Aduanas española prohibiera su paso desde Marruecos hasta no lleven el marcado de la Comunidad Europea (CE) o sean homologables a los productos de la Unión Europea(UE), lo que está originando las protestas de los importadores de áridos y los contratistas melillenses.
Según ha explicado a Europa Press un portavoz de los importadores de áridos y los contratistas afectados, la decisión de prohibir el paso a Melilla de áridos procedentes de Marruecos mientras no lleven el marcado CE ha sido adoptada por la Dependencia Provincial de Aduanas de Melilla, dependiente del Ministerio de Hacienda.
De esta manera, los afectados señalaron que han pedido a este organismo una moratoria de un mes para poder cumplir con este requisito. Así, aseguran, se aceptó en una reunión en la Delegación del Gobierno entre los importadores de áridos y contratistas con el representante del delegado, Juan Pedro Arana, un miembro de la Ciudad Autónoma y el propio responsable de Aduanas. Pero ese acuerdo quedó "en papel mojado porque el organismo dependiente del Ministerio de Hacienda dejó claro que se mantenía la prohibición".
Según explican importadores y contratistas, el pasado 10 de febrero recibieron un correo en el que Aduanas les comunicaba unos requisitos que en el resto del país llevan aplicándose desde 2004 y que en Melilla quieren hacer efectivo ahora. Estos, no obstante, recuerdan que en la Península tuvieron un año de moratoria para prepararse mientras aquí, dicen, "se les niega esta y otras posibilidades, como una demora de cuatro meses".
En este sentido, recuerdan que "Marruecos no es Europa" y por tanto tienen más difícil lograr el marcado CE, pero sí tienen, como ha ocurrido hasta ahora, la posibilidad de que los productos que importan desde Marruecos --ladrillos, grava o arena-- cumplan estos requisitos de calidad europea. Sin embargo, critican que "no se aceptó esta petición y Aduanas volvió a comunicarse con ellos, señalándoles que a partir de las 12 horas del día 12 ya no se permitirían entrar esos áridos si no cumplían con la norma". Ello ha motivado que desde ese día no haya entrado a Melilla ningún camión con estos materiales de construcción.
Tal y como narran, el lunes 14 mantuvieron la citada reunión en la Delegación del Gobierno, con el director provincial de Fomento en representación de Gregorio Escobar, y allí, aseveran, les daban tiempo para preparar un escrito y demandar la moratoria, con el fin de cumplir con una norma que no rechazan y que están dispuestos a aceptar. Pero "se volvieron a reafirmar en su posición de prohibir el paso de esos materiales de construcción", lo que, según dicen los afectados, está paralizando multitud de obras, que no tienen arena, grava y ladrillos con los que trabajar.
Indican que desde Aduanas se les ha propuesto traer áridos desde la Península pero desechan esta posibilidad porque "ello supondría encarecer de manera significativa todas las obras que se realicen en la ciudad ya que son más caros, a los que hay que sumar el transporte".
Entretanto, los afectados han pedido a la Dependencia Provincial de Aduanas de Melilla una solución y flexibilidad sobre todo a la hora de hacer afectiva la norma que afecta a unos 3.000 trabajadores vinculados al sector de la construcción, porque este material es el que usan para las obras tanto públicas como privadas, para la construcción de viviendas, edificios, carreteras y otras actuaciones de este tipo.
Por último, aseguran que Marruecos ha enviado una carta de protesta al Consulado de España por esta prohibición, que también está afectando a trabajadores marroquíes y en la que amenazan que, de seguir así la situación, a partir del lunes 21 "no permitirán dejar pasar ni entrar a Melilla ningún producto, ni pescado ni verduras" dijo el portavoz.
