MADRID, 5 Abr. (CHANCE) -
La Infanta Cristina se ha mostrado muy reservada y alejada ante los focos en su viaje a Barcelona, donde se ha reunido con sus abogados y también ha continuado con su trabajo en La Caixa. Pero eso sí, de la manera más discreta posible.
La hermana del Rey Felipe VI, quiere mantener su imagen fuera de las cámaras, aunque no lo consiga del todo. Por ello, se refugia como bien hemos podido saber en CHANCE tras los cristales tintados del coche que la traslada a los diferentes lugares de la Ciudad Condal.
Muy reservada y andando con pies de plomo por su defensa en el Caso Nóos, la hija del Rey Juan Carlos se reúne con sus abogados en la más estricta intimidad para que no se filtre nada de nada de cómo está llevando el juicio, donde se encuentra sentada en el banquillo junto a su marido Iñaki Urdangarín.
Sin duda, la que fuera Duquesa de Palma quiere mantener un perfil bajo hasta sin duda, su nueva reaparición en los Juzgados de Palma con su marido, el exjugador de balonmano. Hasta entonces, los cristales tintados y la máxima discreción regirán la vida de Cristina de Borbón.
