ALICANTE, 23 May. (EUROPA PRESS) -
Cerca de 300 personas acudieron hoy al mitin abierto que la parlamentaria de UPyD en el Congreso de los Diputados, Rosa Díez, y el candidato número 1 de la lista de UPyD a las elecciones europeas, Francisco Sosa Wagner, ofrecieron hoy en la plaza Calvo Sotelo de Alicante, en el que los ciudadanos pudieron plantear varias cuestiones, la mayoría de ellas relacionadas con el agua, el anteproyecto de la Ley del Aborto, la Justicia y la situación de los saharauis.
El acto electoral, que comenzó poco después de las 12.00 horas en la céntrica plaza alicantina, contó con la intervención de Díez y de Sosa Wagner y también con la de Tarú Haapaniemi, candidata a las elecciones europeas y residente en Alicante y Aurelio Carrillo, coordinador provincial de UPyD en Alicante.
Durante el mitin, Rosa Díez destacó las "diferencias" de su formación con respecto a las mayoritarias y, según dijo, celebrar un "mitin abierto en la calle" es una de ellas, "siempre que nos lo permitan, porque había uno previsto en Toledo la próxima semana y no nos dejan hacerlo en la calle". En su opinión, los grandes partidos tienen "miedo" y por eso, "no dan la palabra a la gente" porque "tienen que utilizar sus palabras para enmascarar sus ideas, si es que las tienen".
Díez centró buena parte de su intervención en la participación ciudadana y también en la necesidad de "políticas de Estado" en economía, en justicia y educación, entre otros temas. Su apuesta, según dijo, es la "vertebración del Estado" porque "garantiza la igualdad". La diputada además quiso resaltar, preguntada por un asistente, que esta vertebración era algo que "el PSOE defendía hasta hace seis años", cuando "cambió por estrategia".
Las preguntas de los asistentes se refirieron a normativas sobre la postura de UPyD sobre el Sahara, sobre la instalación de antenas de telefonía, agua, justicia, corrupción, el aborto y sobre por qué Díez decidió abandonar el PSOE, entre otras, además de cómo puede garantizar la participación de la ciudadanía.
PREGUNTAS
En todas ellas, tanto Díez como Sosa Wagner apelaron a pactos de Estado. Entre ellas, ambos candidatos se refirieron al agua. Mientas que Sosa Wagner apostó por hacer en materia de agua "justo lo contrario que está haciendo el Gobierno", Díez abogó por que el agua sea tratada como un recurso "español y europeo, que lo es" y que la gestión de las cuencas recaiga en ambas instancias y "no en las comunidades autónomas".
Insistió así en "incrementar el ámbito territorial" en la toma de decisiones sobre esta materia para "garantizar igualdad y cohesión a través del agua". Desde su punto de vista, en este aspecto se tiene que "garantizar la sostenibilidad" a través de "pensar en los ciudadanos y no en los territorios".
Según dijo, "se ha desorganizado el sistema hídrico español, que era desde el siglo XIX una referencia europea. "Lo que se ha descosido se ha de volver a coser", insistió.
Igualmente, se comprometió a "luchar con uñas y dientes" por la solución del conflicto saharaui porque "no se trata de algo político" sino de "una cuestión de derechos humanos", al tiempo que acusó al Gobierno de "aliarse con el más fuerte, Marruecos" y de ser "duro con los más débiles, los saharauis".
Además, Díez también se refirió al anteproyecto de la Ley del Aborto, al que calificó como "chapuza", apostó por una independencia "real de la justicia", ya que consideró que en ocasiones hay "impunidad desde arriba hasta abajo". En su opinión, "hay muchas personas que son corruptas y no les pasa nada", pero también "que no lo seas y que toque acusarte de que lo eres".
