El futuro gobierno local propone un nuevo PGOU y derogar el Plan de El Cabanyal en sus medidas para el cambio

Actualizado: viernes, 12 junio 2015 17:35

VALENCIA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

El futuro gobierno municipal de la ciudad de Valencia propone un nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) con un análisis del estado actual de la ciudad, además de la derogación del Plan de El Cabanyal, para lo que plantea una "reformulación" del barrio basada en la rehabilitación de viviendas, participación de asociaciones vecinales y protección de la trama urbana.

Éstas son algunas de las '30 medidas para el cambio de la ciudad de Valencia', documento inspirado en los programas de gobierno de Compromís, Valencia en Comú y PSPV, que, hasta el momento, han consensuado las candidaturas de las dos primeras formaciones políticas, según ha informado la coalición.

Entre las iniciativas de "emergencia social" proponen becas de comedor en escuelas de verano durante las vacaciones, garantizar la alternativa de vivienda ante un desahucio y la creación de una oficina municipal de intermediación hipotecaria, además de asegurar los suministros de agua y energía a las personas más vulnerables. Sobre éste último aspecto, plantea negociar con las empresas la reducción de las tarifas.

Respecto al apartado de "reactivación económica y empleo", los partidos de izquierda abogan por un plan de rehabilitación de viviendas, por "rescatar" el comercio de proximidad y por la puesta en marcha de un plan estratégico de turismo. Del mismo modo, destacan un plan de inserción laboral para promover puestos de trabajo, especialmente para los jóvenes y para las personas mayores de 45 años.

Por otra parte, proponen elaborar una "auditoría ciudadana" del estado general del Ayuntamiento y, al respecto, aseguran que garantizarán el reconocimiento de la ciudad de Valenciana como "cap i casal" y una financiación que atienda las necesidades propias de su condición. En esta misma línea, plantean exigir al Gobierno central y a la Generalitat las infraestructuras e inversiones necesarias.

Del mismo modo, abogan por poner en marcha una oficina municipal contra la corrupción con "instrumentos" para prevenirla, como un registro de proveedores y un canal de denuncia anónimo e independiente. Asimismo, revisarán los contratos municipales para asegurar que ninguno de ellos es "contrario al bien común o al interés general". También defienden la puesta en marcha de un portal de transparencia.

PRESUPUESTOS PARTICIPATIVOS

El nuevo Ejecutivo que gobernará en el Ayuntamiento de Valencia también apuesta por que una parte de las inversiones presupuestarias sean decididas en presupuestos participativos y por que las Juntas de Distrito se conviertan en "asambleas populares con capacidad de control y ejecución de políticas".

Por otro lado, plantea promocionar el valenciano y elaborar un plan estratégico de las Fallas, con la participación de todos los agentes implicados que sirva para "promover la fiesta y avanzar hacia el diálogo entre falleros, vecinos y comerciantes". También propone ayudas a las comisiones con planes de igualdad de género e integración social de migrantes y creación de nuevos concursos con criterios sociales y ecológicos.

Otras medidas que plantean las formaciones políticas de izquierda son fomentar el uso de las energías renovables; promover escuelas infantiles; potenciar la huerta; una nueva ordenanza de ocupación de la vía pública, de forma que los solares vacíos puedan ser aprovechados por la ciudadanía; avanzar hacia un modelo de movilidad sostenible, y reducir el tráfico rodado.