VALÈNCIA, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se reunirá el próximo 27 de abril en Madrid con el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, para abordar las necesidades de infraestructuras en la Comunitat Valenciana tras unos Presupuestos Generales del Estado (PGE) que el jefe del Consell desea que "vuelvan a los corrales" porque sitúan a la región "en el peor escenario" en inversión.
Así lo ha señalado Puig en una comparecencia ante los medios tras la reunión mantenida este miércoles con el ministro, un encuentro "amable" que se ha producido después de que desde la Generalitat se dirigieran al Gobierno central para pedir una reunión con el propio presidente, Mariano Rajoy, ante las cuentas planteadas para este ejercicio.
"Ha mandado al ministro para darnos su explicación y preparar la previsible reunión con Rajoy las próximas semanas", ha dicho el presidente valenciano, que ha defendido el diálogo, que "no es síntoma de debilidad".
Según ha remarcado, ha sido claro con el ministro planteándole que la Comunitat no puede seguir con ese "cóctel nefasto" que integran la infrafinanciación y la infrainversión porque está provocando "pérdidas en la economía valenciana" de medio punto en el último año por la falta de inversión pública, con un motor autonómico "gripado por la falta de financiación y la deuda" y uno estatal que "discrimina" a la región.
Puig ha planteado al ministro la pérdida de poder adquisitivo de la Comunitat respecto a la media nacional y ha expuesto una posición que es "difícilmente contestable" por parte del Ejecutivo central.
Ante las reivindicaciones, el ministro ha detallado que este es un presupuesto para un plazo corto de tiempo y habrá que dialogar de cara a las cuentas de 2018. Esta reunión, además, ha servido para preparar el encuentro del día 27, en el que se replantearán las infraestructuras clave para la Comunitat o convenios que no se están cumpliendo como el de Cercanías.
Preguntado sobre si se ha arrancado algún compromiso por parte del ministro, ha explicado que este pasa por "intentar que proyectos que están en marcha o presupuestados", que se encuentran "eternamente atascados" gocen de mayor agilidad y se destinen a ellos mayores recursos para que avancen. Algunos, ha remarcado Puig, como el AVE entre Valencia y Alicante van "a paso de tortuga".
El jefe del Consell ha insistido en que los PGE de 2017 no le gustan y les gustaría que "volvieran a los corrales" con las enmiendas a la totalidad, pero en caso de que no prosperaran, se debería conseguir como mínimo aumentar en 600 millones de euros las inversiones en la Comunitat a través de las enmiendas parciales.
