BILBAO, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
El niño de 10 años que permanecía ingresado en el Hospital Universitario de Cruces, y la joven de 23 hospitalizada en San Eloy, tras resultar heridos en el incendio registrado el pasado sábado en una vivienda del barrio bilbaíno de Zorroza, en el que murieron cuatro personas de una misma familia, han sido dados de alta este jueves, según ha informado Osakidetza.
Por su parte, según el último parte médico emitido por Osakidetza, el varón adulto ingresado en la Unidad de Grandes Quemados del Hospital de Cruces, en Barakaldo, permanece conectado a ventilación mecánica por presentar un cuadro de distrés respiratorio e inestabilidad hemodinámica. Su pronóstico continúa siendo de extrema gravedad.
Tanto el niño de 10 años ingresado en Pediatría del Hospital Universitario de Cruces, como las chica de 23 años hospitalizada en San Eloy, en Barakaldo, que fue intervenida de fracturas en extremidades inferiores, han sido dados de alta este jueves, debido a su mejoría.
Por otro lado, a la mujer adulta ingresada también en la Unidad de Grandes Quemados del Hospital de Cruces se le están realizando curas de las quemaduras mediante injertos de piel. Se encuentra estable dentro de la gravedad.
Por su parte, en el Hospital Universitario de Basurto continúa hospitalizado en la Unidad de Traumatología el joven de 21 años que ingresó con lesiones en tobillo, cadera y columna. Su evolución es favorable y la previsión es darle de alta en los próximos días.
