SAN SEBASTIÁN, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Red ciudadana por el acuerdo y la consulta, Lokarri, ha considerado que el proceso de reconciliación social requiere "una autocrítica unilateral sobre las actitudes y comportamientos mantenidos en el pasado", así como la inclusión de todos los sectores sociales y políticos presentes en la sociedad vasca y de "todos los sufrimientos injustos padecidos".
El coordinador de Lokarri, Paul Ríos, ha realizado estas afirmaciones en una rueda de prensa que ha celebrado en San Sebastián para presentar la publicación '10 retos para la reconciliación social', documento que recoge las conclusiones del encuentro ciudadano que la red ciudadana celebró el pasado 17 de diciembre en el BEC de Barakaldo.
En la comparecencia, Ríos ha estado acompañado por el secretario honorario de la fundación norirlandesa Healing Through remembering, Oliver Wilkinson, que ofrecerá una conferencia esta tarde en el Aquarium donostiarra.
Wilkinson ha narrado su experiencia en el trabajo a favor del diálogo y del reconocimiento del sufrimiento causado en el conflicto irlandés y ha abogado por gestionar la reconciliación en este tipo de conflictos sin "pasar página", teniendo en cuenta el pasado, al tiempo que ha reclamado a las instituciones que "no busquen soluciones rápidas e incompletas".
"CURAR HERIDAS"
Por su parte, Paul Ríos ha explicado que el proceso de reconciliación social es "el dirigido a curar las heridas y poner las bases para que en el futuro no se repitan estos años de violencia, vulneraciones de Derechos Humanos y exclusión", y ha remarcado que, de cara al futuro, un proceso de estas características exige "poner las bases para prevenir una nueva gestión destructiva del conflicto".
En esa línea, ha asegurado que el proceso de reconciliación social requiere "una autocrítica unilateral sobre las actitudes y comportamientos mantenidos en el pasado" y también necesita "tiempo y paciencia porque la situación y las actitudes no cambian de la noche a la mañana, ya que el pasado aún proyecta sus más negativas consecuencias en el presente".
En su opinión, la reconciliación social exige, además, la inclusión de todos los sectores sociales y políticos presentes en la sociedad vasca, así como de "todos los sufrimientos injustos padecidos".
DIÁLOGO Y CONSENSO
Asimismo, ha apuntado la necesidad de "compartir y definir entre todos qué medidas se deben adoptar para facilitar la reconciliación". "Un ejercicio de diálogo y consenso es necesario para construir un camino hacia la reconciliación social que sea transitable para el conjunto de la ciudadanía", ha añadido.
Finalmente, el coordinador de Lokarri ha precisado que los diez retos que se marcan para la reconciliación social son verdad, memoria, reconocimiento de las víctimas, reconocimiento del daño causado, aportación social, humanización, nueva cultura política, compromiso de no repetición, método pacífico y democrático y cultura de paz.
