UGT y CCOO celebran juntos el 1 de Mayo y piden a López que aborde el diálogo social y que la crisis sea su prioridad

Actualizado: viernes, 1 mayo 2009 17:05


BILBAO, 1 May. (EUROPA PRESS) -

Los sindicatos UGT y CC.OO. de Euskadi, que celebraron hoy de forma conjunta el 1 de Mayo con una manifestación central en Bilbao, exigieron al nuevo Gobierno vasco presidido por los socialistas, que aborde el diálogo social y que la crisis sea su prioridad, a la vez que criticaron a la patronal por "explotar la crisis para beneficiarse y reducir plantillas" y pidieron que no se aprueben ningún ERE sin el acuerdo de los trabajadores.

La manifestación, que recorrió la Gran Vía de Bilbao hasta el Arenal bajo el lema "Krisialdiari aurre egiteko. Empleo, inversión pública y protección social", estuvo encabezada por los secretario generales de UGT-Euskadi, Dámaso Casado, y de CC.OO. Euskadi, Unai Sordo, a los que acompañaron cientos de manifestantes.

Tras la pancarta conjunta, marcharon sindicalistas de UGT-Euskadi, bajo el lema "Por el empleo y la solidaridad", seguidos de los afiliados y simpatizantes de CC.OO. Euskadi, que portaban una pancarta en la que se podía leer "No es tu crisis, pero son tus derechos. Langileok borrokara".

Antes de iniciarse la marcha, el secretario general de CC.OO. Euskadi, Unai Sordo, destacó que el primero de mayo de este año se celebra marcado por una situación económica "grave" y por una crisis económica "que está teniendo una afectación grave y dura en el empleo".

Sordo denunció "las políticas que nos han traído a esta situación, las políticas neoliberales de desregulación de los mercados financieros y las políticas especulativas en el ámbito financiero y en otros ámbitos que nos han traído a esta crisis que no tiene nada que ver con el mercado laboral, ni con la economía real, aunque los está afectando".

Asimismo, criticó las "políticas y recetas" que están planteando las organizaciones empresariales y censuró que "las patronales están apostando no por medidas anticrisis, sino por aprovechar la crisis para plantear las mismas recetas de siempre gastadas, que no sirven para salir de esta situación".

El responsable de CC.OO. advirtió de que "no se va a salir de esta crisis ni deteriorando el trabajo, ni reduciendo las cotizaciones sociales, ni flexibilizando el mercado de trabajo", sino "apostando por un cambio en el patrón del crecimiento, por un fortalecimiento de los derechos laborales y sociales y por situar al trabajo, al empleo y a las personas en el centro de la sociedad y de las prioridades políticas y sociales".

En cuanto al nuevo Gobierno vasco presidido por los socialistas, Sordo explicó que le exigirán "políticas en materia sociolaboral que abran espacios de diálogo social y de confrontación de ideas en mesas de diálogo social por la defensa de los derechos de los trabajadores también en esas mesas".

También reivindicarán al Ejecutivo de Patxi López "una participación efectiva de los agentes sociales a la hora de determinar las políticas sociales, económicas y fiscales".

"Analizaremos al Gobierno como lo hemos hecho con los anteriores y con las mismas demandas, porque estamos ante una situación complicada, por lo que pedimos que la salida a esta situación económica sea la prioridad, o una de las grandes prioridades, del próximo Gobierno vasco", concluyó.

"PROBLEMAS SERIOS"

Por su parte, el secretario general de UGT-Euskadi, Dámaso Casado, afirmó que el diálogo social "es clave" y lamentó que Euskadi es "la única parte de España donde no hay diálogo social". Por ello, esperó que el nuevo Gobierno "abra el dialogo social", así como que todos los que estén dispuestos a participar "vayamos abiertos, no con temas concretos como está haciendo la patronal".

En ese sentido, confió en que Confebask "se adapte a la situación que hay en Euskadi y vaya al diálogo social" y "los que no quieran ir al diálogo social será su responsabilidad".

Casado señaló que la crisis económica está afectando a todos los trabajadores "de forma muy dura", ya que "están perdiendo el empleo y teniendo problemas serios, porque pierden incluso el derecho a prestaciones del desempleo y el subsidio".

En ese sentido, denunció la posición de la patronal y que "muchos empresarios están utilizando y explotando la crisis para beneficiarse y para reducir plantillas". En referencia al planteamiento de Confebask de abaratar el despido, tras rechazarlo, se preguntó "por qué despiden a cientos de trabajadores todos los días, por qué hay 120.000 parados en Euskadi en estos momentos con la noramtiva que hay y por qué en los años anteriores se creaba empleo más que en toda Europa con la misma ley y con la misma situación social".

Casado consideró "clave" abordar el diálogo social para tratar los problemas de los trabajadores y dar "todas las garantías de que no tengan miseria y de que perder el empleo suponga que se formen".

Por ello, insistió en que al nuevo Gobierno vasco de Patxi López, UGT le pedirá "dialogo social, porque es urgente por la situación de los trabajadores y de los expedientes de regulación, que son más de 500 desde enero".

En ese sentido, advirtió de que UGT exigirá que no se apruebe ningún ERE sin acuerdo previo entre trabajadores y las empresas, porque "los empresarios están aprovechando la situación".

UNIDAD SINDICAL

Por otro lado, Casado consideró que "sin la unidad sindical es dificil avanzar y conseguir cosas que mejoren las condiciones laborales de los trabajadores" y destacó el hecho de que en Francia, todos los sindicatos franceses "van a ir hoy juntos a las movilizaciones del primero de mayo, por primera vez desde la segunda guerra mundial".

"Que tomen nota aquí todos los sindicatos que no quieren unidad sindical y quieren estar de forma independiente, de forma que ellos sólo son los que mandan y el resto no existe. Esperemos que reflexionemos y se avance, porque eso mejorará nuestra situación y nuestras condiciones", concluyó.

OTROS SINDICATOS

Por la Gran Vía bilbaína también se manifestaron otros sindicatos como LSB-USO, bajo el lema "Por el empleo, la protección social y los derechos en el trabajo", que exigió un "gran pacto social" y medidas políticas sociales que den cobertura "a los más de 1,4 millones de parados que carecen de ingresos".

STEE-EILAS se manifestó bajo el lema "M21, irakaskuntza ere greba orokorra", ESK lo hizo tras una pancarta en la que se leía "La crisis que la pagen los ricos. Maitzak 21 greba orokorra" y la CNT con el lema "Langileon borroka. Anarkosindicalismoa".