SANTIAGO DE COMPOSTELA, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las distintas jefaturas territoriales de la Consellería de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria están comunicando el cierre de centros o unidades de cara al curso 2017/2018, afectando municipios como As Pontes y Outes (A Coruña) o Ribadavia (Ourense).
El CEIP Emilio de Navasqüés en Outes será uno de los centros que cerrarán el próximo curso "sin previo aviso", según ha denunciado la comunidad educativa del centro que ha convocado una concentración de protesta a las 12.00 horas.
En As Pontes, por su parte, desaparecerá el CPI Montecaxado, y los 195 alumnos de infantil y primaria pasarán a escolarizarse en el CEIP A Magdalena.
Los 67 estudiantes de ESO del centro se trasladarán al IES Moncho Valcarce que, según indica FETE-UGT, pasará a ser "un macrocentro para atender" las aulas de secundaria y bachillerato de todo el municipio.
La Consellería ha defendido la nueva planificación, indicando que ha sido elaborada teniendo en cuenta "criterios pedagógicos, demográficos, geográficos y de gestión responsable de los recursos" además de respetar la ratio máxima de alumno.
En Ribadavia, por otra parte, se han eliminado las enseñanzas de secundaria del CPI Tomás de Lemos, que pasará a convertirse en Centro de Infantil y Primaria, y el alumnado de ESO (unos 178) pasará a integrarse en el IES O Ribeiro.
En este caso, Educación ha asegurado que "no supondrá ningún cambio para los alumnos y las familias" desde el punto de vista del desplazamiento, dado que ambos centros están separados por una valla.
"OSCURANTISMO"
En esta línea, la CIG-Ensino ha denunciado la previsión de la Xunta de suprimir diez puestos docentes en el IES de Celanova y ha reprochado la "visión mercantilista y profundamente neoliberal" de la acción de la Consellería de Educación.
"Prosigue con una política de recortes que, en materia de personal, implica el despido de profesorado interino, que se reducirá al oferta para profesorado provisional y que docentes con destino definitivos serán desplazados de su puesto de trabajo".
El sindicato FETE-UGT ha denunciado la "falta de negociación" y de "transparencia" con estas modificaciones, producto de "una decisión unilateral" y "sin previa consulta a la comunidad educativa".
De hecho, han reprochado el "oscurantismo de esta maniobra", desvelando que en una reunión de la Xunta de Persoal Docente con la Xefatura Territorial de esta provincia, celebrada este 21 de julio, la administración autonómica negó la ejecución de cambios en la rede de centros.
"Se solicitarán explicaciones por lo ocurrido y los datos que verifiquen la necesidad de cerrar este servicio", ha señalado FETE-UGT que no descarta "llevar a cabo movilizaciones" de considerarlo necesarios.
