Actualizado: viernes, 7 julio 2017 15:24

   SANTIAGO DE COMPOSTELA, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -

   El director de orquesta venezolano Gustavo Dudamel ha participado en un coloquio con jóvenes del conservatorio de Santiago en el Auditorio Abanca, en el que ha defendido el papel de la música como "herramienta de desarrollo social" y ha propuesto "buscar uniones con otros estilos" para "tachar el término 'clásica'" de la música.

   En el coloquio, en el que también ha participado el presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, el director venezolano ha animado a los jóvenes a "disfrutar de la música y de lo que hacen". De este modo, Dudamel ha sido el protagonista de la segunda edición de 'Palabras para Galicia', una iniciativa de la entidad financiera para promover el emprendimiento juvenil.

   Esta visita a la comunidad culminará con el concierto de este viernes a las 21,00 horas en la Praza do Obradoiro, en el que debutará con la Orquesta Sinfónica de Galicia y el Orfeón Donostiarra en la interpretación de la 9ª Sinfonía de Beethoven.

   Con respecto a la música clásica, se ha referido a ella como "un edificio que se ha ido construyendo haciéndose más pequeño" en lugar de convertirse en un "árbol frondoso". Por ello, el director ha defendido que el término 'clásica' debe ser "tachado" de la música, porque, ha añadido, "no es de muertos ni aburrida".

   En consecuencia, ha apostado por buscar "uniones" con otros estilos promovidos por artistas como Beyoncé, Coldplay y Bruno Mars, con los que, según ha declarado, ha colaborado.

JUVENTUD Y ÉXITO DE DUDAMEL

   En el encuentro, Dudamel ha respondido a las preguntas de los cuatro estudiantes del conservatorio que participaron en el coloquio, al tiempo que ha intercambiado experiencias personales sobre sus inicios y su éxito actual.

   Preguntado sobre sus primeros pasos, ha declarado que, a los cuatro años, se enamoró de la música por el olor de un libro de solfeo que tenía su padre, y a partir de ahí estudió hasta convertirse en director asistente de su orquesta a los 11 años. Desde entonces, su camino hacia el éxito, ha asegurado, ha sido "de una naturalidad extrema", pues reconoce que "sigue siendo un niño".

   Además, ha afirmado que trabajar con orquestas de diferentes lugares, como la Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela o la Filarmónica de Los Ángeles, de las cuales es director, no le resulta difícil, ya que siempre ve a los músicos "de la misma forma" y "con mucho respeto".

ORQUESTAS, "PEQUEÑA COMUNIDAD"

   Se ha referido a las orquestas como una "pequeña comunidad en la que cada persona piensa distinto y cada instrumento suena distinto", por lo que trata de encontrar un "punto común para crear una obra de arte".

   En cuanto a la formación de los jóvenes, ha recalcado la creatividad como algo "primordial", por lo que considera que el sistema educativo tiene que "replantearse profundamente" la forma en la que educa a los niños para no quitarles "el acceso a la belleza".

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