AI acusa a EEUU de enviar munición a Egipto pese a la "violenta represión"

Actualizado: miércoles, 7 diciembre 2011 18:27


MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional (AI) ha acusado este miércoles a Estados unidos de haber transferido munición de forma repetida e a Egipto a pesar de la "violenta campaña de represión de las fuerzas de seguridad contra manifestantes" en los últimos meses en este país.

Según la ONG, el pasado 26 de noviembre llegó desde Estados Unidos un cargamento dirigido al Ministerio del Interior egipcio con al menos siete toneladas de "munición fumígena", que incluye sustancias químicas irritantes y agentes antidisturbios como el gas lacrimógeno.

Esta fue una de las tres entregas de armas realizadas por la empresa estadounidense Combined Systems desde que comentó la brutal represión de las manifestaciones de la Revolución del 25 de enero que culminó con la dimisión del presidente Hosni Mubarak.

"Estos envíos de armas por Estados Unidos a las fuerzas de seguridad egipcias deben parar hasta que se tenga la certidumbre de que esas municiones, armas y otros materiales no tienen relación con el derramamiento de sangre en las calles de Egipto", ha reclamado Brian Wood, de Amnistía Internacional.

El pasado 8 de abril, Combined Systems envió 21 toneladas de munición desde el puerto estadounidense de Wilmington hasta el puerto egipcio de Suez, mientras que el 8 de agosto realizó otro envío de 17,9 toneladas de munición desde Nueva York con destino a Port Said.

Según la base de datos sobre comercio de mercancías PIERS, ambos cargamentos llevaban el código de producto de balas, cartuchos y proyectiles, aunque el último también se describía como "munición fumígena". El tercer cargamento llegó el 26 de noviembre al puerto de Adabiya, cerca de Suez, a bordo del barco danés 'Marianne Danica', propiedad de la empresa danesa H.Folmer & Cok, según la ONG.

Combined Systems, con sede en Jamestown (Estados Unidos), fabrica todo tipo de municiones para las fuerzas armadas y los cuerpos encargados de hacer cumplir la ley, incluidas municiones de impacto, como proyectiles de goma, y munición irritante, como el gas lacrimógeno CS.

WASHINGTON RECONOCE LOS ENVÍOS

El 1 de diciembre, un portavoz del Departamento de Estado norteamericano confirmó que se habían concedido "licencias de exportación a dos empresas estadounidenses para exportar gas lacrimógeno y otros agentes antidisturbios no letales a Egipto. Y la concesión más reciente de una de estas licencias tuvo lugar en julio".

En este sentido, Ward ha denunciado que "estas licencias se concedieron en un momento en que el Gobierno egipcio estaba reaccionando a las protestas haciendo uso excesivo de la fuerza y a menudo empleando medios letales".

"Es inconcebible que las autoridades estadounidenses no conocieran los indicios de abusos cometidos por las fuerzas de seguridad egipcias, ampliamente documentados. No tenían que haber concedido esas licencias", ha subrayado en un comunicado.

La ONG recuerda que el mes pasado las fuerzas de seguridad dispersaron violentamente las protestas contra el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas con gas lacrimógeno, con el resultado de al menos dos docenas de muertos y varios centenares de heridos.

Muchos de los cartuchos y granadas recogidos por manifestantes en la plaza Tahrir eran de gas lacrimógeno fabricado en Estados Unidos, incluidas la marca Combined Systems o Combined Tactical Systems, que es la división de la compañía especializada en equipamiento para agentes encargados de hacer cumplir la ley.

"Ni siquiera en situaciones de enfrentamiento de manifestantes contra la policía antidisturbios es lícito hacer uso excesivo de la fuerza y emplear gas lacrimógeno imprudentemente", ha subrayado Brian Wood, que ha pedido que se reformen las fuerzas de seguridad egipcias y se les dé formación "en el respeto de las normas de la ONU relativas al empleo de la fuerza y las armas de fuego".

"Si no hay un cambio fundamental en la conducta y la rendición de cuentas de las fuerzas de seguridad, es irresponsable que países extranjeros suministren armas y otros materiales a unas fuerzas que con toda probabilidad harán uso indebido de ellos", ha defendido.