MADRID, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
La explosión de gas registrada el lunes en una mina de carbón de la localidad china de Laisu, en la provincia de Chongqing, en el suroeste del país, ha dejado un total de 33 muertos, según el último balance oficial recogido por la agencia de noticias estatal, Xinhua.
La madrugada del miércoles más de 80 miembros del equipo de rescate han logrado recuperar los cadáveres de los 15 mineros que aún estaban desaparecidos después de la explosión, que tuvo lugar en la mina de Jinshangou.
La investigación en torno a la causa del accidente está abierta, y está siendo supervisada por la Administración Estatal de Seguridad Laboral.
El accidente tuvo lugar cuando 35 mineros se encontraban en la mina, en torno a las 11.30 horas del lunes. Dos de los trabajadores lograron escapar ilesos, si bien el resto quedaron atrapados. El martes por la tarde se habían recuperado los cadáveres de 18 de ellos.
Las autoridades locales están trabajando para identificar a los fallecidos.
Las minas de China son las más letales del mundo debido a la falta de cumplimiento de los criterios de seguridad y la premura por cubrir la demanda de su economía.
La investigación preliminar apunta a que en este caso, la mina se excedía de los límites de minería permitidos, además de que presentaba un equipo insuficiente y con mal funcionamiento, escasa ventilación y una gestión desordenada.
