CARACAS, 5 Mar. (EDIZIONES) -
Hugo Chávez sigue siendo el líder más popular entre los venezolanos, por encima de su sucesor en el cargo, Nicolás Maduro, y de pujantes dirigentes opositores como Leopoldo López, incluso dos años después de su muerte.
Chávez llegó al cargo en 1999 con una popularidad cercana al 90 por ciento que consiguió mantener entre el 50 y el 75 por ciento a lo largo de sus 14 años de mandato, siendo su momento más bajo en 2009, cuando consigue eliminar los límites para la reelección de cargos públicos, con un 31 por ciento.
Al final de sus días, y en el contexto de una gran incertidumbre dentro y fuera de Venezuela por saber qué pasaría tras su muerte, Chávez se mantuvo en un 50 por ciento que ha logrado mantener intacto hasta hoy, de acuerdo con los últimos sondeos de opinión.
Este 50 por ciento le posiciona como el venezolano más querido en estos momentos, en contraste con su "hijo" putativo, Maduro, que vive sus horas más bajas, y en general las horas más bajas de un presidente venezolano, con un 20 por ciento de popularidad.
En la Mesa de Unidad Democrática (MUD), a pesar del mal momento que vive Miraflores, los datos no son mejores. López, a quien su reclusión en la cárcel militar de Ramo Verde ha convertido en la cabeza visible de la coalición opositora, se sitúa en torno al 40 por ciento.
UNA GENERACIÓN HUÉRFANA
Chávez dejó huérfana a toda una generación de venezolanos que vieron en su movimiento bolivariano al dirigente que necesitaban para salir de la pobreza y la marginación. A la gran suma de simpatías que consiguió durante sus mandatos, se le unió un número igual o mayor de enemigos que consideraron su personal estilo de mando como una dictadura y que siempre criticaron sus medidas socialistas.
Nació en 1954 en la localidad de Sabaneta, oeste de Venezuela, el segundo de seis hijos de una familia trabajadora. Se casó en dos ocasiones. Su primera esposa fue Nancy Colmenares con la que tuvo tres hijos. Contrajo matrimonio por segunda vez con María Isabel Rodríguez, con quien tuvo otra hija, aunque se separó en 2003.
Chávez ingresó en el Ejército en 1971, donde comenzó su carrera en la Academia Militar. En 1982 fundó en las propias Fuerzas Armadas el Movimiento Bolivariano Revolucionario 200, en referencia al bicentenario del nacimiento de Símon Bolivar, líder de la independencia venezolana y una de las principales figuras a las que Chávez ha recurrido durante toda su carrera.
Irrumpió en política en 1992, cuando como teniente coronel dirigió un golpe de Estado contra el entonces presidente venezolano, Carlos Andrés Pérez. Tras el fracaso que supuso esta iniciativa, pasó dos años en la cárcel antes de que le indultara Rafael Caldera, tras un acuerdo con los grupos de izquierda.
Con su salida de prisión, Chávez inició su ascenso político. Con el Movimiento Quinta República (MVR) entró al Parlamento como segunda fuerza en 1998 y el 6 de diciembre de ese mismo año fue elegido presidente con más del 56 por ciento de los votos.
Chávez inició la refundación del país con la puesta en marcha de la Asamblea Nacional Constituyente para cambiar la Carta Magna que terminaría sentando las bases de su reelección en el año 2000 y la creación de su República Bolivariana.
GOLPE DE ESTADO
La oposición realizó acciones de fuerza --como multitudinarias manifestaciones en Caracas-- que se vieron colmadas en 2002 con un golpe militar. Sin embargo, las reaccionarias decisiones del nuevo Gobierno devolvieron a Chávez al poder apenas tres días después.
A pesar de este sonoro fracaso, la oposición no cejó en su intento por derrocarle. Las protestas continuaron con un gran paro de varios sectores industriales a finales de 2002 que llevaron a una campaña para conseguir las firmas necesarias para celebrar un referéndum revocatorio contra Chávez en 2004, del que consiguió salir indemne.
En esos años Venezuela empezó a despuntar como potencia económica, que se tradujo en un aumento de los subsidios a las clases más desfavorecidas, con la puesta en marcha de las Misiones Bolivarianas, y en un discreto pero constante crecimiento de las Fuerzas Armadas.
Con una oposición desaparecida, que boicoteó los comicios parlamentarios de 2005, y la reelección de Chávez en 2006 por seis años, el líder bolivariano aglutinó a todos los movimientos que respaldaban su gestión para fundar el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), bajo cuyas siglas siguió avanzando en la nacionalización de empresas y recursos y en programas sociales.
POLÍTICA EXTERIOR
Chávez fue forjando su figura internacional, ya muy conocida tras sobrevivir al golpe de Estado. Así, señaló al 'imperio' de Estados Unidos como principal enemigo de la paz, al tiempo que impulsó una mejora de los lazos con Rusia y a otros países cuyos dirigentes criticaban la supremacía 'yanqui', como la Libia de Muamar Gadafi o Irán.
En la región, unió a los principales dirigentes de izquierdas, en el marco de un esfuerzo que inició en 2004 con la creación de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) junto al entonces presidente cubano, Fidel Castro, su gran amigo.
El 'chavismo' comenzó a extenderse por la región gracias a las inversiones impulsadas en algunos países dirigidos por mandatarios que habían imitado el estilo de Chávez, como Evo Morales en Bolivia, Daniel Ortega en Nicaragua, Manuel Zelaya en Honduras y Rafael Correa en Ecuador.
A esta lista de países, se le unieron las alianzas estratégicas que desarrolló con la Argentina de Néstor Kirchner y el Brasil de Luiz Inacio Lula da Silva. Sin embargo, se enfrentó en varias ocasiones al colombiano Álvaro Uribe por incidentes fronterizos que llevaron a ambos países a estar al borde del conflicto militar.
ENFERMEDAD
Los peores años de Chávez, en términos políticos llegaron en la recta final de su mandato, con reformas autoritarias, un aumento de la delincuencia común y una falta de inversión industrial que sentó las bases de la grave crisis económica actual.
A pesar del paulatino rechazo de la sociedad venezolana, Chávez consiguió en 2009 aprobar uno de los puntos más controvertidos: la reelección indefinida, en un intento por perpetuar su modelo bolivariano.
Pero este proyecto unipersonal se vio truncado con la detección en 2011 de una "lesión" pélvica. El secretismo de su enfermedad le llevó a operarse en Cuba y a someterse a diferentes ciclos de quimioterapia en la isla caribeña. Aunque no tenía la misma fuerza que en etapas anteriores ni mantuvo su presencia monopólica en la prensa, Chávez declaró que estaba "libre" de cáncer y volvió arrasó en las elecciones presidenciales del 7 de octubre de 2012.
El 8 de diciembre de 2012, sin haber jurado aún su cargo como jefe de Estado, anunció que debía viajar a Cuba para operarse de nuevo. Chávez pidió entonces a la sociedad venezolana que eligiese a Nicolás Maduro, su entonces vicepresidente, en caso de que a él "le ocurriese algo".
Chávez anunció el 18 de febrero de 2013 a través de su cuenta oficial en Twitter (@chavezcandanga) que había regresado a Venezuela, tras permanecer 70 días en La Habana y fue ingresado en un hospital militar de Caracas. Sin embargo, no se pudo ver ninguna imagen en movimiento del mandatario desde el regreso a su país.
Su estilo de dirigir el país le ha granjeado fuertes reacciones tanto en la sociedad venezolana como en la comunidad internacional que ha conseguido mantenerle en el centro de la escena en varias cumbres internacionales, como el episodio en el que el Rey Juan Carlos le mandó callar en una cumbre iberoamericana o su comparación del presidente estadounidense George W. Bush con el mismo diablo.
