KABUL, 16 Ago. (Reuters/EP) -
La ciudad afgana de Ghazni ha recuperado la calma este jueves, después de cinco días de intensos combates en los que las fuerzas de seguridad han intentado repeler la ofensiva de los talibán sobre este núcleo urbano de la parte oriental del país.
"Las operaciones de limpieza continúan, pero la ciudad, que se está recuperando de la pesadilla talibán, está en calma", ha dicho el portavoz de las fuerzas estadounidenses desplegadas en Afganistán, el teniente coronel Martin O'Donell.
No obstante, según ha indicado el propio O'Donell, la localidad ha quedado devastada. Ahora sus habitantes lidian con la amenaza de artefactos explosivos ocultos y problemas en los suministros de agua y electricidad.
Los talibán iniciaron el pasado viernes una campaña para conquistar Ghazni con la que llegaron a rodear el centro, por lo que el Gobierno de Ashraf Ghani envió refuerzos a los soldados afganos desplegados allí.
De acuerdo con el balance ofrecido después del fin de semana por O'Donnell, en estos días más de 140 insurgentes afganos han muerto, mientras que el Ministerio de Interior ha confirmado 70 soldados fallecidos.
La ofensiva talibán sobre Ghazni, que se encuentra en una importante carretera que conecta la capital, Kabul, con el sur de Afganistán, es un duro revés para Ghani, que ha apostado por reactivar el proceso de paz.
