SANTIAGO, 13 Ene. (Reuters/EP) -
El gobierno chileno ha garantizado este sábado que el Papa Francisco no correrá ningún peligro durante su visita a Chile la próxima semana, a pesar de los ataques incendiarios que han afectado esta pasada noche a un grupo de iglesias católicas en la capital.
El ministro del Interior chileno, Mario Fernández, ha indicado a la cadena de radio BioBío que detrás de estos actos estarían grupos pequeños y con una capacidad de acción limitada, por lo que se trata de hechos que "son, desde luego, graves y repudiables, pero también hay que ver en su medida las cosas".
Las cinco iglesias católicas fueron atacadas por desconocidos durante la madrugada del viernes en Santiago, con la quema parcial de recintos y la detonación de artefactos explosivos "caseros", justo antes de la visita del pontífice, que comienza el próximo lunes y se extiende hasta el 18 de enero.
Fernández ha afirmado que el líder de la Iglesia Católica "no debiera correr riesgo" en el país, a pesar de estos ataques que no dejaron heridos y tampoco fueron reivindicados por alguna agrupación o movimiento, ocurrieron en diferentes municipios de Santiago.
El ministro del Interior ha añadido que "se hace seguimiento de grupos que aparecen, desaparecen pero no podemos estar hablando acá de grupos importantes de articulación realmente peligrosos".
