MADRID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de científicos británicos, australianos y estadounidenses ha encontrado "evidencias concluyentes" de que la potente erupción del volcán 'Lusi', registrada en 2006 cerca de la segunda ciudad más grande de indonesia, Surabaya (este de la isla de Java), y que causó la muerte de 13 personas y el desplazamiento de alrededor de 60.000, estuvo relacionada con las perforaciones para la prospección de gas llevadas a cabo por la empresa energética indonesia PT Lapindo Brantas, vinculada a un antiguo ministro del Gobierno de Susilo Bambang Yudhoyono.
En un foro de discusión sobre el tema difundido esta semana por la edición digital de la publicación 'Marine and Petroleum Geology', un alto representante de Lapindo Brantas, Nurrochmat Sawolo, ha negado que las perforaciones en un pozo de prospección de gas hubieran causado el desastre y ha asegurado que la erupción se debió a un terremoto cuyo epicentro se registró a unos 280 kilómetros al suroeste.
En respuesta, el director del equipo de investigadores, Richard Davies, del Instituto de Energía de la Universidad británica de Durham, ha asegurado en el mismo foro de discusión que los datos hechos públicos por la propia Lapindo aportan nuevas evidencias de que las causas deben buscarse en las prospecciones. Este mismo equipo dirigido por Davies había anunciado en 2008 que estaba prácticamente convencido de que algunas prospecciones habían causado el siniestro.
"El desastre fue causado por el arrastre de tuberías y brocas de perforación hacia el exterior del pozo en un momento en que éste estaba inestable", explicó. "Esto provocó una gran 'patada' en el pozo, donde se produjo una fuerte afluencia de agua y gas procedente de las formaciones rocosas de los alrededores que no pudo ser controlada", prosiguió Davies.
Según el investigador británico, uno de los informes diarios sobre las perforaciones de la empresa, elaborados desde el terreno, demuestra que "Lapindo Brantas había bombeado fango pesado procedente del pozo para intentar contener el lodo del volcán". "Se consiguió en parte y se redujo la velocidad de la erupción de barro del volcán", añadió. No obstante, "el hecho de que se hubiera contenido la erupción supone la primera evidencia concluyente de que el pozo de contención estaba conectado con el volcán en el momento de la erupción", añadió.
Otro miembro del equipo, Mark Tingay, de la Universidad australiana de Curtin, rechazó los argumentos de Lapindo según los cuales la erupción fue causada por un terremoto registrado dos días antes en la ciudad de Yogyakarta, en el centro de Java. "El terremoto al que atribuyen la responsabilidad tuvo un impacto escaso debido a la distancia", declaró a Reuters.
GRUPO BAKRIE
La vicepresidenta de Lapindo, Yuniwati Teryana, ha descalificado las conclusiones del informe. "No tienen todos los datos, no hay correlación entre la erupción y Lapindo", aseveró Teryana. Según la directiva, la versión de la empresa fue confirmada por el Tribunal Supremo de Indonesia, que en 2009 desestimó una denuncia por este caso. "En el tribunal hubo varios testigos, tanto favorables como contrarios, que expresaron sus opiniones y todos debemos respetar las decisiones del tribunal", declaró.
La Policía indonesia también interrumpió el año pasado una investigación penal sobre las perforaciones por falta de evidencias. Teryana agregó, asimismo, que Lapindo ya ha pagado 6,3 billones de rupias (casi 500 millones de euros) en compensaciones a las víctimas del desastre.
La erupción del 'Lusi' fue un accidente particularmente embarazoso para el Gobierno del presidente Susilo Bambang Yudhoyono, debido a que Lapindo está vinculado al Grupo Bakrie, perteneciente a la familia del ex ministro de Bienestar indonesio Aburizal Bakrie. El poderoso empresario Bakrie ya no pertenece al Gobierno y preside en la actualidad el partido Golkar, que forma parte de la coalición que apoya a Yudhoyono en el Parlamento.
