LONDRES, 27 Abr. (Reuters/EP) -
El líder del Partido Laborista británico, Ed Miliband, ha prometido que si llega a primer ministro tras las elecciones del 7 de mayo eliminará el denominado 'stamp duty' para la primera vivienda, en un aparente mensaje al votante joven insatisfecho con los altos precios del mercado inmobiliario.
Miliband propone eliminar temporalmente el gravamen --durante tres años-- para quienes adquieran su primera vivienda siempre y cuando ésta no supere las 300.000 libras (unos 420.000 euros). El ahorro para los compradores podría alcanzar las 5.000 libras (7.000 euros).
"No hay nada más británico que el sueño de tener una casa en propiedad, pero para muchos jóvenes ese sueño se está debilitando", ha dicho Miliband durante un mitin electoral en el norte de Inglaterra. El Partido Laborista promete fomentar la construcción de al menos 200.000 viviendas antes del año 2020.
Los conservadores, que el año pasado revisaron el sistema de recaudación del 'stamp duty' y rebajaron su cuota para la mayoría de propietarios, han acusado a la formación rival de improvisar en sus políticas y han advertido de que costarían más de 500 millones de libras (alrededor de 700 millones de euros).
Miliband también ha incluido en su lista de promesas un derecho preferente para que quienes hayan vivido en una misma zona durante más de tres años puedan acceder, de forma prioritaria, a viviendas de nueva construcción.
En este sentido, los laboristas quieren evitar la entrada de inversores extranjeros dándoles mayores oportunidades a los compradores locales, incrementando los impuestos para los foráneos y penalizando económicamente las viviendas vacías.
CAMERON, DESENFADADO
Las elecciones del 7 de mayo llegan sin un claro favorito. Conservadores y laboristas se disputan una ventaja que, en cualquier caso, no será definitiva, ya que todas las encuestas pronostican que ninguno de los dos grandes partidos obtendrá la mayoría absoluta y tendrá garantizado gobernar.
En este empate virtual, toda estrategia cuenta. Así, en las últimas semanas los candidatos se han esforzado por lanzar una batería de promesas en sus mítines pero también han cuidado su imagen en apariciones públicas.
Cameron ha hecho de la credibilidad económica uno de sus principales ejes de campaña, pero muchos ven en él el candidato encorsetado incapaz de conectar con nuevos votantes al margen de los ya convencidos. El 'premier' ha dejado de lado este lunes su habitual chaqueta y ha hablado con muchos más gestos de los que suele utilizar.
Así, Cameron ha aparcado su lado 'tory' más recto para presentar las medidas con las que quiere ayudar a los pequeños empresarios. "Si estoy más animado con esto, es porque me siento animado", ha explicado el 'premier' ante los periodistas que le han preguntado por su giro.
