PEKÍN, 1 Jul. (Reuters/EP) -
El Ejército chino debe llevar la "civilización moderna" a las zonas del sur de la provincia de Xinjiang, de mayoría musulmana, para ayudar al desarrollo de su economía, según han afirmado este miércoles dos altos cargos militares en una influyente revista.
Durante los últimos años, cientos de personas han perdido la vida debido al clima de violencia en la provincia china de Xinjiang, donde vive la mayoría musulmana de la etnia 'uigur'. El Gobierno responsabiliza de los conflictos violentos a los milicianos islamistas y separatistas que quieren establecer un Estado independiente, el denominado Turkestán Oriental.
En un artículo publicado en el último número de la revista bimensual del Partido Comunista 'Qiushi', el comandante militar de Xinjiang, Li Haiyang, y su comisario militar, Miao Wenjiang, han manifestado que los soldados chinos deben "amar ardientemente" esta zona. "Debemos cuidar la unidad étnica como cuidamos de nuestros ojos y arrimarnos a la gente de todos los grupos étnicos tan cerca como las semillas de la granada", han escrito los militares.
El artículo afirma que los soldados deben contribuir a desarrollar la economía en el sur de Xinjiang y animar a los ciudadanos de estas zonas a "avanzar hacia la civilización moderna y dejar atrás el extremismo religioso" mediante el acceso de las zonas rulares a las ciencias, la cultura, el derecho y la sanidad.
Cada año, todas las unidades militares deben contribuir con fondos para ayudar a resolver problemas como la falta de agua potable o las dificultades de acceso a la sanidad pública, han manifestado los militares en el artículo, donde también han pedido una mayor atención a la educación, asegurando que los niños deben "estudiar, vivir y crecer" en las escuelas.
Los 'uigur' han seguido tradicionalmente una vía moderada del islam, pero muchos han comenzado a adoptar prácticas más típicas de zonas como Arabia Saudí o Afganistán, como el velo integral para las mujeres, ya que China ha intensificado una campaña de seguridad en los últimos años. "La lucha contra el terror y para mantener la estabilidad es compleja; se trata de una lucha real con cuchillos y armas, una lucha a vida o muerte", ha asegurado el artículo.
Los expertos aseguran que la discriminación laboral, aumentada por la afluencia de ciudadanos chinos de la etnia mayoritaria, 'han', ha desencadenado el rechazo y las protestas entre la etnia 'uigur' de la provincia de Xinjiang.
Pekín ha comenzado a prestar más atención al desarrollo de las regiones, particularmente en aquellas zonas del país de mayoría 'uigur' y de religiosos conservadores.
