Los periodistas que trabajen en Pakistán podrán portar armas de fuego

Actualizado: miércoles, 1 junio 2011 19:44


MADRID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -

El ministro del Interior de Pakistán, Rehman Malik, ha dicho este miércoles que a partir de ahora los periodistas que trabajen en este país podrán llevar armas de fuego de pequeño calibre para defenderse, un anuncio que llega un día después de que apareciera el cuerpo sin vida de un periodista que había escrito un artículo sobre las conexiones entre Al Qaeda y el Ejército paquistaní.

Un portavoz del Ministerio ha precisado que las autoridades entregarán licencias a los periodistas para que puedan portar armas. Pero el secretario general del Sindicato Federal de Periodistas de Pakistán, Afzal Butt, ha criticado esta medida por considerar que es el Gobierno el responsable de proteger a estos profesionales.

Después de visitar a la familia de Salim Shahzad en su casa de Islamabad, Malik ha asegurado además que se investigará la posible implicación del servicio de inteligencia del Ejército (ISI) en su secuestro. Shahzad, que trabajaba para el portal de noticias 'Asia Times' y la agencia de noticias italiana Adnkronos International, desapareció el domingo pasado en Islamabad.

Su cadáver, hallado dos días después en la localidad de Mandi Bahauddin, en el noreste del país, presenta signos de tortura, según la Policía.

Ali Dayan Hasan, representante de la organización Human Rights Watch (HRW) en Pakistán, dijo este martes que Shahzad le contó que estaba amenazado por el ISI. "Me dijo que le seguían, que recibía llamadas amenazadoras y que estaba vigilado por la Inteligencia", declaró a la agencia Reuters.

"No podemos decir con seguridad quién mató a Saleem Shahzad, pero lo que sí podemos decir con seguridad es que Saleem Shahzad estaba seriamente amenazado por el ISI. Human Rights Watch tiene sobrados motivos para pensar que esa amenaza era creíble", ha añadido.

EL ISI NIEGA SU IMPLICACIÓN

Sin embargo, el ministro del Interior ha indicado que la muerte del periodista podría enmarcarse en "un caso de enemistad personal". El ISI, por su parte, ha emitido un comunicado en el que ha dejado claro que "las acusaciones contra agencias sensibles del país por su supuesta implicación en el asesinato de Shahzad son totalmente infundadas".

"En ausencia de pruebas y sin que se haya realizado una investigación, hacer tales acusaciones es una conducta poco profesional por parte de los medios de comunicación", agrega.

Malik ha dicho que la familia del fallecido no está satisfecha con los resultados de la autopsia y ha pedido un segundo examen post mórtem, pero aún no se conocen los resultados.

Shahzad desapareció dos días después de escribir un artículo en 'Asia Times' en el que afirmaba que el ataque que llevó a cabo Al Qaeda la semana pasada contra una base de la Marina paquistaní en la ciudad de Karachi fue un acto de venganza por la detención de varios oficiales de la Armada presuntamente relacionados con la red terrorista.

INVESTIGACIÓN

Malik ha comunicado a la familia del periodista asesinado que el Gobierno ha creado una "comisión de investigación conjunta" para aclarar las circunstancias de su muerte y que en las pesquisas participarán todos los servicios de inteligencia y seguridad de Pakistán.

El primer ministro paquistaní, Yusuf Raza Gilani, expresó este martes su tristeza por el fallecimiento de Shahzad y ordenó que se iniciase inmediatamente una investigación sobre su secuestro y asesinato. Además, subrayó que los culpables responderán ante la Justicia "cueste lo que cueste".

Gilani aseveró que su Gobierno "cree firmemente en la libertad de expresión y considera que la libertad de prensa es esencial para fortalecer los valores y la cultura democráticos".

Salim Shahzad, que tenía 40 años, estaba casado y era padre de tres hijos, ha sido enterrado este miércoles en Karachi. En las oraciones previas al entierro han participado cientos de familiares, amigos, políticos y periodistas

El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, y la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, entre otros líderes internacionales, han condenado el secuestro y el asesinato del periodista. Clinton ha destacado que "sus informaciones sobre temas de terrorismo y los servicios de inteligencia sacaron a la luz el problema que supone el extremismo para la estabilidad de Pakistán".