Actualizado: miércoles, 25 mayo 2016 12:06

BEIRUT, 25 May. (Reuters/EP) -

Dos grupos rebeldes sirios que han estado enfrentándose entre sí en los alrededores de Damasco han negociado un alto el fuego en Qatar, según han informado en sendos comunicados.

Más de 500 personas han muerto desde abril cuando estallaron los enfrentamientos entre los grupos rivales Jaish al Islam y Failaq al Rahman. Su disputa ha sido aprovechada por las fuerzas del Gobierno sirio para capturar territorio en la zona de Ghuta Oriental, a las afueras de Damasco.

"Se ha llegado a un acuerdo completo de alto el fuego, supervisado por el jefe coordinador del Alto Comité para las Negociaciones, Riab Hiyab", ha indicado Jaish al Islam en un comunicado publicado durante la noche, precisando que las conversaciones se han celebrado en Doha.

Qatar ha sido un importante patrocinador de los grupos armados que luchan para derrocar al régimen de Bashar al Assad desde hace más de cinco años.

Jaish al Islam forma parte del Alto Comité para las Negociaciones, que aglutina a los principales grupos de oposición, es uno de los mayores grupos rebeldes sirios y ha sido la facción domintante en Ghuta Oriental.

Failaq al Rahman, que también es un grupo islamista, ha estado apoyado en la batalla contra Jaish al Islam por combatientes vinculados al Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria. Varios intentos anteriores de mediación para cesar los combates habían fracasado.

La semana pasada, las fuerzas gubernamentales sirias y las milicias aliadas se hicieron con una amplia zona al sureste de Damasco tras arrebatársela a los rebeldes en lo que el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos dijo que fue uno de los avances gubernamentales más importantes este año.

Según los comunicados, los representantes de los dos grupos se reunieron en Doha y cerraron el acuerdo el martes para cesar los enfrentamientos, liberar a los detenidos, abrir las carreteras a los civiles y devolver las instituciones civiles a sus propietarios. También han acordado cesar las campañas mediáticas incendiarias y formar un tribunal que juzgue las muertes que se han producido.

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