JERUSALÉN, 14 Jul. (Reuters/EP) -
Los tres israelíes detenidos por el asesinato del adolescente palestino han confesado haberle secuestrado y quemado vivo, según han informado este lunes fuentes oficiales.
Tras levantarse el secreto de sumario por el caso, se ha sabido que los sospechosos, dos de ellos menores, han indicado a los interrogadores que con el asesinato de Mohamed Abu Judair buscaban venganza por el asesinato de los tres jóvenes israelíes en Cisjordania.
Los nombres de los sospechosos no se han dado a conocer por orden de un tribunal israelí a la espera de su imputación formal. El adulto sospechoso que se enfrenta a los cargos más graves podría alegar problemas mentales pasados para mitigar la pena.
"Espero conseguir pronto el material de la investigación, en el que buscaré apoyo para la consideración de que hay un problema complejo en la cuestión de la culpabilidad penal de mi cliente", ha indicado un abogado de Honenu, una organización de ayuda legal ultranacionalista.
Según el Shin Bet, la agencia de seguridad israelí, en las primeras horas del 2 de julio, cuando los musulmanes celebraban el final del ayuno del Ramadán, los tres sospechosos "patrullaron barrios árabes de Jerusalén durante varias horas, en un intento por encontrar una víctima que secuestrar, hasta que localizaron a Mohamed Abu Judair".
Tras introducirle a la fuerza en el coche, condujeron hasta un bosque fuera de la ciudad donde el sospechoso de 29 años le golpeó en la cabeza con una llave para el cambio de neumáticos y, ayudado por los dos chicos de 17 años, le roció con combustible y le prendió fuego, según el Shin Bet.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que ha acusado a Hamás del secuestro y asesinato de los tres jóvenes judíos, calificó de "deplorable" el asesinato de Abu Judair y ordenó a la Policía que encontrara a los culplables y que estos fueran procesados.
