BRUSELAS, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea criticó hoy a España y al resto de países mediterráneos por no cumplir adecuadamente las nuevas restricciones para la pesca en el mar Mediterráneo, que entraron en vigor el pasado 1 de junio tras casi cuatro años de prórrogas, y advirtió de que adoptará "medidas severas" si las autoridades nacionales no velan por el respeto del nuevo reglamento.
Las nuevas restricciones para el Mediterráneo incluyen el cambio de malla en la flota de arrastre y el aumento de las distancias mínimas a la costa para pescar, que pasan de entre 0,7 y 1,5 millas a más de una milla y media, lo que se traduce en unos fondos marinos de mayor profundidad.
En la modalidad de cerco las novedades se refieren a la distancia de la costa desde la que se realiza la pesquería, que pasa de 35 a 50 metros de profundidad
La comisaria de Pesca, Maria Damanaki, se mostró "verdaderamente decepcionada" porque se trata de medidas "que los propios Estados aprobaron por unanimidad en 2006". "Es difícil de aceptar que los países no puedan o no quieran poner en marcha un compromiso de 2006", insistió.
España ha solicitado algunas excepciones para determinadas flotas en la distancia de la costa y para el uso de la draga.
Según los datos del Ejecutivo comunitario, más del 54% de los recursos pesqueros del Mediterráneo sufren el exceso de pesca o su supervivencia está en riesgo. Por ello, la UE decidió adoptar un reglamento más severo con la gestión de la pesca, que permitiera la reconstitución de los caladeros, proteger el entorno y garantizar la sostenibilidad de la pesa comunitaria.
Su aplicación ha sido progresiva y las últimas disposiciones entraron en vigor hace una semana, pero los primeros controles de Bruselas indican que las autoridades nacionales "no han tomado todas las medidas necesarias para asegurar su plena puesta en marcha".
"¡El periodo de transición ha terminado! Llamo a los Estados miembros a reaccionar desde ya", insistió la comisaria, tras advertir de que vigilará que el nuevo reglamento se aplique "severamente".
Entre las infracciones "graves" detectadas por los servicios de la Comisión se incluye el tamaño de la malla, la talla mínima de los peces y otras cuestiones de selectividad. Los países tampoco han cumplido sus obligaciones de presentar planes de gestión nacionales o de designar nuevas zonas de pesca protegidas, tal y como prevé el reglamento.
