LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria adecuará la señalización de las 'zonas 30' de la ciudad antes de final de año, en las que el peatón tiene prioridad, seguido por las bicicletas, patines o patinetes.
Según informa este martes la administración local en un comunicado, las seis zonas actuales están marcadas en el inicio y el final del trayecto, pero a lo largo del mismo, la señalética es "contradictoria o inexistente", aspecto al que el Gobierno municipal está poniendo solución.
La 'zonas 30' están distribuidas en las áreas de Arenales, Ciudad Jardín, Alcaravaneras, Santa Catalina, Schamann, Guanarteme y la calle Obispo Rabadán.
"Durante el mandato anterior, el Gobierno municipal se limitó a marcar las puertas de entrada y salida, pero no instalaron o cambiaron las señales internas, provocando algunas de ellas dudas a los usuarios", ha explicado el director general de Movilidad, Heriberto Dávila.
Asimismo, ha añadido que tampoco se tomaron medidas para favorecer una reducción real de la velocidad y que lo que se encontró el grupo de gobierno al llegar "fueron zonas 30 ficticias o simbólicas".
De esta manera, aseguró que con las labores que el Ayuntamiento está desarrollando en la actualidad "se va a acabar con esta situación".
Las actuaciones, que se iniciaron en las Alcaravaneras, consisten, principalmente, en la aplicación de señalética horizontal, la señalización de zonas escolares y la modificación de la prioridad en las intersecciones.
"Para evitar trazados largos que puedan incitar al aumento de la velocidad de los conductores, estamos incorporando más señales, que además son más visibles", ha comentado el director general de Movilidad.
En estas áreas, que se implantan en calles de poca intensidad de tráfico, de carácter local o de vecindad, el peatón tiene prioridad sobre cualquier medio de transporte, seguido por las bicicletas, patines o patinetes.
El objetivo de estos tramos es favorecer la convivencia entre los medios de transporte y el uso del espacio público por la ciudadanía, así como la recuperación de la calle como lugar de encuentro social y potenciar los desplazamientos a pie o en bicicleta.
