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LOGROÑO, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
La psicóloga clínica Rosa Jové ha asegurado, en declaraciones a Europa Press, que los niños que duermen con sus padres (colecho), son porteados y toman lactancia materna "son más sanos física y psicológicamente". "No quiere decir que los otros estén enfermos, pero está comprobado que los niños así criados son más sanos", ha añadido.
Licenciada en Psicología y en Historia y Geografía, Rosa Jové es especialmente conocida por su libro 'Dormir sin lágrimas' y por sus artículos sobre crianza respetuosa. Además, es madre de dos hijos. Este sábado, viajará a Logroño para hablar sobre 'Lactancia y crianza' dentro de las IV Jornadas de la Lactancia en La Rioja.
En una entrevista previa a Europa Press se ha mostrado convencida de la influencia del tipo de crianza en la conducta. Si los últimos datos de adolescentes señalan edades más tempranas de inicio en el alcohol, o con problemas como la anorexia, es porque los padres, que siempre "lo hacen lo mejor que pueden", han recibido, sin embargo, "directrices" equivocadas de pedagogos, psicólogos y pediatras.
"Todo comenzó en la Revolución Industrial", explica, cuando las madres pasaron de ir al campo con su bebé a dejarlos para ir a la fábrica. "Y había que decirles" que debían dormir separados de sus madres y tomar leche artificial.
Pero los especialistas que se han "actualizado" saben que no es lo positivo para un bebé. "Y el pediatra que, hoy en día, dice que hay que dar de comer a un bebé cada tres horas, y no a demanda, es que no se ha actualizado", ha afirmado.
"Yo siempre digo que a un niño no hay que dejarle llorar", ha añadido. Así, ha invitado a pensar qué sensación queda en un niño que llora, "tenga razón o no", y su propia familia no le hace caso. En cambio, atender a un niño reduce, a futuro, los problemas de ansiedad y le hace "más seguro".
"LA SOCIEDAD NO PERMITE PEGAR A UN NIÑO"
Jové asegura que hay una frase que le gusta mucho: "quien castiga estando enfadado no castiga, se venga". Y a esta le une otra: "el padre que pega a un hijo es que tiene pocos recursos".
"Hay muchas cosas que hacer, el mundo está lleno de padres que no pegan a sus hijos y los educan", ha señalado. A su juicio, "debe haber tolerancia cero a la violencia: del padre al hijo, del hijo al padre, del hombre a la mujer".
Advierte, no obstante, de que aunque se vea a padres que castigan físicamente a sus hijos "la sociedad no lo permite" y, por eso, se cambió el artículo 154 del Código Civil que, antes, permitía que los padres o tutores "corrigieran" moderadamente a los hijos.
A partir del cambio (de 2007) ahora éstos deben "respetar su integridad física y psicológica". El bofetón no está permitido, "y da igual que se de en la cara o en el culo". El cambio, ha explicado, vino impuesto por la adopción internacional ya que algunos países estaban frenando las adopciones para no mandar niños a España y que les pegasen.
Las consecuencias a futuro de corregir con el conocido "cachete a tiempo" cuya referencia temporal Jové rechaza, "porque no hay ningún cachete a tiempo", son, para la psicóloga, imaginables. "Cuando el adolescente ya mide un palmo más que su padre piensa: pues ahora te vas a enterar tú".
