MURCIA, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Universidad de Murcia (UMU), a lo largo de la reunión que ha mantenido este viernes con los sindicatos en la Mesa de Negociación, se ha mostrado más flexible respecto a los recortes que pretende llevar a cabo en algunos ámbitos y, por ejemplo, propone reducir, como máximo, un tercio la jornada laboral del personal interino, y despedir a parte de un grupo de 39 PAS contratado por el capítulo 6 de los presupuestos.
En declaraciones a Europa Press, Ros ha señalado que la Universidad cree que estas son las medidas que tiene que tomar y que "no hay otra salida", aunque la institución docente se ha mostrado abierta a que los sindicatos les planteen alternativas. Sin embargo, los sindicatos han contestado que no tiene "ni datos suficientes ni tiempo" para plantear estas alternativas.
Al parecer, la universidad insiste en que no quiere que se vaya ningún interino a la calle y, para ello, planteó en origen una reducción de un tercio de sus salarios, aunque ahora ha flexibilizado sus expectativas y propone una disminución, como máximo, de un tercio de sus nóminas, lo que según Ros, puede significar que la jornada se reduzca a un 25 por ciento, por ejemplo.
En este sentido, la UMU se ha comprometido a destinar a los interinos "el dinero que pueda pagar la Comunidad Autónoma", de forma que la rebaja de jornada dependerá de que el Gobierno regional "pague de una vez el dinero", según Ros.
También ha apuntado el posible despido de "alguno" de los 39 contratados por el capítulo 6, de los que la universidad se ha comprometido a rescatar todos los que pueda.
En principio, Ros ha señalado que estas 39 personas recibirán el próximo 31 de julio la carta de finiquito, de cese de contrato, aunque la universidad ha señalado que va a intentar contratar a alguno dentro del capítulo 1, porque sus funciones las tiene que realizar forzadamente alguien.
No obstante, ha dicho desconocer si serán 10 ó 20 los trabajadores que lograrán "repescar", aunque ya han adelantado que no van a poder rescatar a todos.
Ros ha puntualizado que estos 39 trabajadores estaban contratados por el capítulo 6, con aportaciones externas, en vez de por el capítulo 1 que es en el que se cargan las partidas de las nóminas, pero realizan servicios que quedarían suspendidos en caso de ser despedidos.
Por eso, la universidad plantea mantener esos servicios, aunque el número de trabajadores que se encargará de ello será más reducido, según advierte Ros.
CALENDARIO DE MOVILIZACIONES
Ros ha lamentado que en el encuentro de este viernes no ha habido negociación, y la universidad se ha limitado a informarles de los recortes que prevé llevar a cabo en "ayudas sociales, las coberturas de vacantes, en los profesores asociados, la no promoción de titulares a catedráticos y en los planes de pensiones, que vienen dadas por ley".
"La universidad sabe que los sindicatos nunca vamos a aceptar un recorte de salarios ni un recorte de plantilla", según Ros, quien manifiesta que los sindicatos van a intentar hasta el último momento paralizar los recortes.
De hecho, han convocado el próximo lunes al Comité de Resistencia de la Universidad en el que también están representados los alumnos y otras asociaciones, para plantear la situación y proponer nuevas movilizaciones.
El lunes a las 9.00 horas habrá una concentración en el rectorado para estudiar estas nuevas movilizaciones, y el martes han convocado una huelga del profesorado, tanto en el campus de Espinardo como en la Merced, para expresar su rechazo a la forma en la que el rector, José Antonio Cobacho, ha propuesto aplicar el recorte de 10,1 millones de euros que le exige la Comunidad.
Ros ha señalado que, en adelante, no hay ningún calendario de negociación, ya que la ley ahora "pide negociación, pero no acuerdo, y la universidad considera que ha negociado, aunque no ha llegado a ningún acuerdo".
