Atentado.- Con Ignacio Uría se eleva a 41 el número de empresarios vascos asesinados por ETA

Actualizado: miércoles, 3 diciembre 2008 16:36

Es el primer empresario fallecido por atentado terrorista tras el asesinato de José María Korta en el año 2000

MADRID, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -

La muerte de Ignacio Uría Mendizábal eleva a 41 el número de empresarios vascos asesinados por ETA. La organización terrorista no acababa con la vida de ningún empresario desde el año 2000, cuando atentó contra el presidente de la patronal guipuzcoana José María Korta.

El empresario Ignacio Uría Mendizábal, propietario de la empresa Altuna y Uría, fue tiroteado hoy en la localidad de Azpeitia (Guipúzcoa). Su empresa es una de las concesionarias del Tren de Alta Velocidad vasco (TAV) y varios camiones-hormigonera de su propiedad habían sufrido daños y pintada en ataques terroristas.

Con su muerte, son ya 41 los empresarios vascos asesinados por ETA. El presidente de Confebask, Miguel Lazpiur, tuvo oportunidad de recordar recientemente a todos ellos en el acto de 25 aniversario de la patronal vasca celebrado en Bilbao y presidido por el Rey. Entre ellos, citó a Javier Ibarra o José María Korta.

Korta fue precisamente el último empresario asesinado por ETA hasta hoy. El presidente de la patronal guipuzcoana fue atacado el 8 de agosto de 2000 cuando se disponía a montar en su coche, momento en el que otro automóvil aparcado a su lado estalló provocando gravísimas heridas al empresario, que murió en el mismo lugar 40 minutos después.

Antes que él, la organización terrorista había asesinado a casi una cuarentena de empresarios vascos, la mayoría propietarios de pequeños comercios, restaurantes o bares. Además, la mayor parte fueron asesinados en los años 80.

Varios de ellos fueron secuestrados antes de ser asesinados, como el caso del empresario Javier Ybarra, que permaneció secuestrado alrededor de un mes.

Hasta la muerte de José María Korta, el último empresario víctima de ETA fue Francisco Arratibel, que recibió un tiro en la cabeza en Tolosa (Guipúzcoa) en febrero de 1997 cuando salía de almorzar para reincorporarse a la comparsa de un carnaval que dirigía.