Denuncia que su estrategia está agotada y dice que no van a conseguir ahora lo que no obtuvieron con la lucha armada
MADRID, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
El disidente de ETA Andoni Altza Hernández, uno de los presos acogidos a la denominada 'Vía Nanclares' tras romper con su pasado terrorista lanza un ataque frontal contra las tesis de la banda y su Colectivo de Presos (EPPK) tachando de "agotada" la estrategia oficial de lograr la salida de los presos por medio de una negociación.
"Si los comisarios políticos continúan planteando las posturas y alternativas de siempre, los presos van a tener que seguir cumpliendo las penas enteras", dice Altza Hernández en una entrevista concedida al diario Berria el pasado día 14 y recogida por Europa Press. Este preso cuestiona a los presos que plantean una solución integral por medio de una "negociación" que, recuerda "no se logró con la lucha armada". "Esa estrategia está agotada", opina.
Además se refiere al debate sobre la 'doctrina Parot' en Estrasburgo y dice que la derogación de esta medida "será importante para un grupo de presos" entre los que se incluye a él mismo y al resto internos disidentes recluidos ahora en la cárcel de Zaballa procedentes de Nanclares de la Oca.
"Pero lo que no se dice es que la mayoría de presos continuará igual", apunta Altza en referencia a los etarras condenados con el nuevo Código Penal "que continuarán en la misma situación porque no tienen redención, la mayoría con penas de entre 30 y 40 años". "Tampoco cambiará la situación para los que están cumpliendo 10-15 años por kale borroka", añade.
Dice que los pasos dados por los presos disidentes han tenido un coste en lo personal y carga contra el Colectivo de Presos de ETA (EPPK) sobre los que dice que "no pueden aceptar que nadie que esté fuera de su control dé pasos" y reivindica que los pasos dados por la llamada 'Vía Nanclares' son "éticos, políticos y valientes". Además anuncia que "con vistas al futuro vamos a continuar por el mismo camino".
Explica su recorrido a lo largo de los años relatando que "hubo un tiempo" en el que consideraban la violencia "imprescindible" y que por eso se implicaron, "para ser coherentes", pero lamenta que "luego se crean contradicciones a la hora de utilizar la lucha armada". "Te topas con la mentalidad insoportable que se crea ahí y, finalmente, pasas a pensar que eso tiene que acabar", dice.
AUTOCRÍTICA Y RECONOCER EL DOLOR CAUSADO A LAS VÍCTIMAS
Según dice, para los presos acogidos a la 'Vía Nanclares' la solución a su situación pasa por "hacer una declaración autocrítica y reconocer el daño y el dolor causado a las víctimas". "Si no se hace eso, ¿en qué se va a basar la convivencia?. Además, aunque otros no los hagan, ¿por qué no vamos a poder dar nosotros esos pasos?", se pregunta.
Para ahondar en esta postura destaca que "las reuniones con víctimas" (realizadas durante la pasada legislatura) les han "enriquecido y ayudado y fueron inolvidables especialmente para profundizar en la reflexión crítica". Estos encuentros fueron paralizados con la llegada al Gobierno del PP, pero anuncia que "el nuevo Gobierno vasco ha dicho que va a seguir con el camino iniciado". Eso es lo que esperamos", apunta.
Responde al rechazo del EPPK diciendo que los pasos más importantes los han dado por su "propia iniciativa, sin mirar al Gobierno". "Nosotros elegimos esta vía porque vimos que la última estación que nos quedaba para un final negociado era Loiola (durante la tregua de 2006), y como siempre, la decisión de romper ese proceso se tomó sin tener en cuenta la opinión de los presos y de mucha gente de la izquierda abertzale".
En este sentido pone como ejemplo a la izquierda abertzale para decir que hubo presos como él que no querían "seguir siendo subordinados de comisarios políticos externos, es decir, en manos de los que no han hecho más que llevar al fracaso durante todos estos años". Andoni Altza se refiere varias veces a la oportunidad perdida y culpa a la banda en ese momento dirigida por le fallecido López Peña, alias 'Thierry': "El acuerdo logrado en Loiola no fue suficiente para los que nos han llevado al fracaso (...) Siempre en fuera de juego y tarde".
"¿A día de hoy hay opciones para que los presos regresen a Euskal Herria? Si el tema se plantea seriamente y de una manera realista, si. De lo contrario, será difícil, porque el problema se va a alargar y enredar en una sociedad que tiene otros problemas más graves", concluye.
