El inspector médico acusado en la Operación Karlos dice que ha pecado "de pardillo"

Francisco Casto A La Entrada De Los Juzgados Durante El Juicio Del Caso Karlos
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 12 mayo 2011 15:11

Casto asegura haberse sentido "utilizado" por Carlos Carretero, del que no sabía que tuviera una gestoría

CÁDIZ, 12 May. (EUROPA PRESS) -

El inspector médico Francisco Casto, uno de los principales acusados por la Operación Karlos, ha manifestado en el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial que se ha sentido como un "hombre de paja" y "muy utilizado" por Carlos Carretero, otro de los acusados por la operación y que apuntó al médico como uno de los cerebros de la trama para estafar a la Seguridad Social con la concesión de pensiones supuestamente fraudulentas. Además, ha asegurado que ha pecado "de pardillo".

Casto ha declinado contestar las preguntas del Ministerio Fiscal y de las acusaciones, declarando únicamente a las cuestiones planteadas por su defensa. Así, ha comenzado su intervención recordando todo el funcionamiento administrativo para el otorgamiento de una invalidez por incapacidad. Asimismo, ha defendido que a su juicio una incapacidad no beneficia al trabajador y que por el contrario, es perjudicial.

Tras asegurar que "nunca" había estado en Ubrique y que la primera vez que ha visitado esa población fue "hace diez días" con motivo de su nuevo empleo, ha relatado el caso del expediente de Carretero por el que se le otorga su invalidez.

Así, el inspector médico ha manifestado que Carretero fue citado a su consulta y aportó un informe de su médico de primaria. Además, ha señalado que se recibió un fax del Ayuntamiento de Ubrique solicitando que se valorara su situación de incapacidad temporal por incapacidad permanente.

Casto ha asegurado que en el informe elaborado por él, propuso una valoración en "grado moderado" porque tenía capacidad para hacer cualquier trabajado donde la capacidad visual no fuera decisiva. A partir de ahí, según el inspector médico, el expediente pasa al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) y él deja de tener relación con dicho expediente.

PREMISA FALSA

El inspector médico ha manifestado que desde la investigación (apuntando así a la Agencia Tributaria y a la Guardia Civil), se ha partido de una "premisa falsa" al afirmar que él "tiene restringida su área de actuación a Cádiz, San Fernando y El Puerto".

Esta "premisa" es utilizada para acusar a Francisco Casto de solicitar a los que supuestamente conseguía una pensión de manera fraudulenta que se empadronaran o registraran en Cádiz para que tocara en su jurisdicción.

Según Francisco Casto, esto "es falso", ya que "la inspección de servicio sanitario tiene ámbito provincial", por lo que "es absurdo que organice una trama para que la gente se registre en Cádiz", ya que le podía tocar cualquier paciente, fuera en Cádiz, Algeciras, San Martín del Tesorillo o San José del Valle. Así, ha asegurado que "nunca" propuso a nadie que se domiciliara en Cádiz para que fuera a su consulta, "porque no tiene sentido".

NUNCA HE RECIBIDO DINERO

El inspector médico ha asegurado que "nunca" ha recibido dinero de "ninguna persona" de las que a lo largo de su carrera ha tenido que reconocer. Igualmente, ha señalado que "jamás" ha recibido tampoco ningún regalo, tal y como lo ha acusado en el juicio Carlos Carretero, que manifestó que le hacía "favores" y que incluso le reformó una casa "a precio de coste". Algo que Francisco Casto ha negado y ha pedido prueba de ellos, ya que, según ha indicado, no existe nada, ni albañiles, ni permisos para reformas, ni nada".

En este sentido, al ser preguntado por su patrimonio, ha asegurado que sus posesiones se reducen a un coche de segunda mano del año 1999 y una casa adosada en El Puerto con una hipoteca en un banco.

En cuanto al caso de Remedios Torres, la madre de María José Campanario, ha señalado que fue citada en su consulta y que se presentó allí como una señora que era limpiadora que trabajaba en una inmobiliaria. Al contar con lesiones cervicales que no se podía operar, se tramita una petición de invalidez que se cursa al INSS y a partir de ahí, según ha señalado, deja de tener contacto con ese expediente administrativo.

Francisco Casto ha negado que fuera él quien tramara que suplantaran en una consulta a la madre de María José Campanario. A este respecto, el inspector médico ha acusado a Carlos Carretero y a su novia Elisa Calvente de contradecirse en sus declaraciones realizadas en el juicio, ya que "Carretero dijo que lo llamé a él y Elisa Calvente dijo que la llamé a ella", por lo que "fallan en la estrategia", ya que además, "tampoco tengo secretaria".

Finalmente, ha asegurado que "nunca" ha tenido conciencia de que en algún expediente tramitado por él se adjuntaran "informes falsos" y ha manifestado que si lo hubiera sabido hubiera acudido al Ministerio Fiscal.