ALICANTE, 30 May. (EUROPA PRESS) -
El ministro en funciones de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, se ha comprometido "desde este mismo momento" a utilizar las embajadas españolas en zonas en riesgo de conflicto a "modo de antenas de alerta temprana" para informar al Consejo de Seguridad de la ONU de las situaciones que "puedan degenerar en amenazas a la paz y seguridad internacionales".
Además, ha propuesto respaldar el proyecto del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, para la creación de una oficina regional en el norte de África como instrumento de prevención de conflictos.
La propuesta la ha planteado en el discurso inaugural de la primera Conferencia Internacional de Diplomacia Preventiva del Mediterráneo, que se celebra este lunes y martes en Casa Mediterráneo, en Alicante, a la que han asistido, entre otros, el 'president' de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig.
Margallo ha defendido dos "ideas-fuerza" basadas en el "necesario giro hacia la prevención" y "la importancia de tener en cuenta el factor local, cultural y religioso".
El ministro ha abundado en que España "apoya los esfuerzos de Naciones Unidas para fortalecer los instrumentos de prevención de conflictos" para evitar "compartimentos estancos" y, para ello, ha incidido en reforzar "la cooperación y la colaboración" entre la ONU y las organizaciones locales.
Asimismo, ha opinado que España debería "reforzar" las unidades de diplomacia preventiva y "posibilitar una mayor interacción entre ellas". En ese sentido, ha anunciado que se utilizarán las embajadas en zonas en riesgo de conflicto "a modo de antenas de alerta temprana" que puedan advertir "al Consejo, en tiempo real" de las situaciones que "puedan degenerar en amenazas a la paz y seguridad internacionales".
García-Margallo ha recomendado, además, la constitución de un "órgano subsidiario de diplomacia preventiva" que recibiera y revisara esas alertas "antes de pasarlas a la atención de los miembros del Consejo".
EXTREMISMO VIOLENTO
El ministro ha puesto de relieve que en la lucha contra el extremismo violento, desde la experiencia española, son "esenciales" dos elementos. De una parte, "escuchar a las víctimas" porque "su voz" deslegitima "cualquier intento por justificación de la barbarie".
Y, en segundo lugar, fortalecer la colaboración judicial para que los terroristas y "quienes colaboran con ellos, no puedan tener una percepción de impunidad".
"Basado en todo ello, reitero, mi propuesta de nombrar un representante de alto nivel del secretario general de Naciones Unidas para la prevención del extremismo violento que garantice la coordinación en la puesta en práctica del plan de acción del secretario general", ha declarado.
Finalmente, ha puesto sobre la mesa la creación de un tribunal internacional contra el terrorismo porque "la lucha contra la impunidad y la rendición de cuentas son elementos esenciales de la prevención de conflictos".
DERECHOS HUMANOS
Por otra parte, José Manuel García-Margallo ha indicado que ya "nadie duda" de la vinculación entre la prevención y la defensa de los derechos humanos.
Ha destacado que el secretario general de la ONU ha impulsado una iniciativa en ese sentido y ha subrayado que en el norte de África y en Oriente Medio existe "una intensa demanda a favor de los derechos humanos" y ello "requiere del apoyo de la comunidad internacional para fortalecer el Estado de Derecho, el sistema judicial y el acceso a la justicia".
Ligado a ello, ha defendido prestar atención a los derechos culturales como "elemento esencial de una sociedad democrática e inclusiva" y ha revelado que España e Italia han promovido un fondo para la protección del patrimonio cultural en zonas de conflicto "al que nos disponemos a realizar nuestra contribución".
Ha destacado que España está en el marco para la creación de una red global "de puntos focales sobre mujeres, paz y seguridad para intercambiar buenas prácticas", incorporando "la perspectiva de género".
Finalmente, Margallo ha incidido en la promoción de la libertad de prensa y el trabajo de las ONG son "igualmente esenciales para sostener una sociedad tolerante, inclusiva y pacífica. Escuchar el testimonio de los periodistas y la sociedad civil es fundamental a la hora de tomar el pulso sobre el terreno y fortalecer la prevención".
