MADRID, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
El nuevo fiscal general del Estado, José Manuel Maza, ha asegurado este miércoles que el Ministerio Fiscal debe prestar especial atención a la corrupción si bien ha recordado que hasta el más perverso de los de los delincuentes merece el respeto de sus derechos y garantías por lo que la Fiscalía debe ser sensible a los derechos de los ciudadanos sometidos a una investigación penal.
Este es uno de los mensajes lanzados por el magistrado del Supremo propuesto por el Ejecutivo a suceder a Consuelo Madrigal en su comparecencia ante la Comisión de Justicia del Congreso de Diputados, donde ha expuesto que el fiscal general del Estado tiene que tener además "especial sensibilidad" hacia los problemas cotidianos.
Maza ha destacado que la corrupción merece una condena de la máxima energía y contundencia y se ha comprometido a hacer gala de "transparencia" y comparecer en la cámara baja todas las veces que así se le reclame para explicar la postura de la Fiscalía en los distintos asuntos.
La comparecencia de Maza ha comenzado pasadas las 17.00 horas de este miércoles después de que ayer la Mesa del Congreso convocara la Comisión para que los grupos parlamentarios valoren su idoneidad. En su mensaje ha recordado que el futuro fiscal general tiene que tener los requisitos de "esfuerzo y honestidad" además de "dedicación y rectitud".
"El respeto a la Ley es el núcleo mismo del Estado de derecho; quien encabeza esta institución no debe tener otro objetivo que el de propiciar que la norma jurídica se respete y se cumpla", ha dicho el magistrado durante su comparecencia en la Cámara Baja después de que la semana pasada el Pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) avalara la idoneidad de Maza.
DEFIENDE LA AUTONOMÍA DE LA FISCALÍA
Maza ha defendido la necesidad de autonomía de actuación del Ministerio Público, que debe ir acompañada siempre del necesario "sentido de la responsabilidad como para responder de cada decisión ya tomada y los resultados que de ellas deban derivarse".
Se ha comprometido, además, a no incurrir en los dos defectos que, a su entender, no deben acompañar a un candidato a dirigir la Fiscalía General del Estado: "la cobardía y la debilidad".
