MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) - La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha visitado este lunes el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) por primera vez desde que asumió su cargo y ha reivindicado que el servicio haya vuelto a ser competencia de Defensa, ya que a su juicio, que estuviera ubicado en Vicepresidencia podía favorecer una lectura "más política" de la institución. Este lunes Robles, acompañada del director del CNI, José Sanz Roldán, del Jefe de Estado Mayor de la Defensa, Fernando Alejandre, y de altos cargos del Ministerio, ha realizado la visita para conocer de primera mano el trabajo que realiza esta institución y posteriormente ha colocado una corona de flores en memoria de los caídos en el cuerpo. La titular de Defensa ha hecho especial hincapié en que hay que desmontar "tópicos" y "malos entendidos" que existen en el "acerbo popular" sobre el servicio español de espionaje y que, ha reiterado, "no se corresponden con la realidad". Así, ha explicado que en el CNI no se trabaja con una finalidad política, ni partidista, "ni para seguir a personas concretas" y ha puesto en valor que el CNI trabaja en asuntos de "mayor calado". "Para aquellos que hablan de determinados de dossieres personales en el CNI, eso es rigurosamente falso", ha señalado Robles, quien ha negado una participación individual o instrumental. "No es aceptable, el CNI actúa conforme a unas prioridades que marca el Gobierno y no se sale de esas prioridades", ha dicho. Robles ha defendido el beneficio de "imagen" que supone que el CNI haya pasado a ser una competencia de Defensa, frente al anterior Gobierno cuando dependía de Vicepresidencia. "Se podía percibir con una lectura más política que de defensa y seguridad", ha señalado la ministra socialista. Por ello, ha defendido el movimiento del nuevo Ejecutivo y ha alegado que de esta manera "se evita que pueda haber dudas sobre un uso partidista" del servicio. Ante la pregunta directa de los periodistas de qué tentaciones políticas habría tenido el anterior Gobierno del PP, Robles ha señalado que lo ignora y no le corresponde comentarlo. "El Gobierno quiere descartarlo contundentemente y que no haya dudas", ha explicado, señalando que quiere dejar la Inteligencia "al margen" de las luchas partidistas. Robles ha puesto de relieve que el CNI, ante todo, es "un servicio", y se somete al control parlamentario y al control judicial. Por ello ha explicado que Sanz Roldán siempre ha dado cuenta satisfactoriamente a los grupos parlamentarios en la comisión de Secretos Oficiales del Congreso de los Diputados y que existe un magistrado en el Tribunal Supremo que ejerce un control judicial al CNI. Así, la titular de Defensa ha enmarcado su visita en un ejercicio de transparencia y de reconocimiento del CNI. Según ha dicho, el encuentro es un "espaldarazo" a los 3.500 trabajadores de la Inteligencia española y a una labor que abordan preservando el secreto y con el objetivo de defender los intereses españoles. En la conclusión de la visita, la ministra ha participado junto al director del CNI en un acto de homenaje de los caídos del servicio en un monumento ubicado en el complejo de la institución de Inteligencia. Robles y Sanz Roldán han colocado una corona de flores y han guardado un minuto de silencio ante una escultura que recuerda a los ocho espías españoles asesinados en Irak en 2003 y a todos los demás caídos anónimos del CNI.