Condenado a cinco años de cárcel por intentar asesinar a su expareja en Berriozar

Palacio De Justicia De Pamplona.
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 2 julio 2012 15:55

PAMPLONA, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Sección Tercera de la Audiencia de Navarra ha condenado a cinco años de prisión a un acusado de intentar asesinar a su expareja el 14 de febrero de 2000 en Berriozar. Deberá indemnizar a la víctima con 6.072 euros y no podrá aproximarse a la mujer en un radio de 500 metros ni volver a Pamplona en cinco años.

El procesado, según consta en la sentencia, colocó y accionó un artefacto explosivo fabricado por él en el vehículo propiedad de su excompañera sentimental. La resolución puede ser recurrida ante el Tribunal Supremo.

La sentencia da por probado que el acusado mantuvo una relación sentimental con la víctima y que aunque a finales de julio de 1999 la mujer comunicó su intención de finalizar la relación, ambos siguieron viviendo juntos en Pamplona.

El acusado, recoge el fallo, decidió acabar con la vida de la mujer y, para ello, fabricó un artefacto explosivo, que introdujo en una caja de cartón, que tenía una mecha pirotécnica de 230 centímetros, pólvora de feria y 17 tuercas de metal de 17 milímetros de diámetro.

El procesado, continúa la sentencia, colocó el artefacto debajo de la alfombrilla del asiento del conductor del coche de la víctima y extendió la mecha por debajo de la tapicería hasta la parte posterior.

Fue sobre las 19.30 horas del día 14 de febrero, después de que la mujer se metiera en su vehículo tras haber ayudado al acusado a descargar una furgoneta, cuando el procesado le entregó un cubo de ropa sucia que la víctima colocó a los pies del asiento del copiloto.

Así, "y con la intención de causar la muerte de la mujer", recoge la sentencia, el acusado "prendió el extremo de la mecha con fuego haciendo que se activara el artefacto explosivo".

Como consecuencia de la explosión, la mujer sufrió "barotrauma bilateral" que necesitó una primera asistencia médica, aunque no le quedaron secuelas, y un hombre que paseaba por el lugar sufrió un golpe en la cabeza y algún rasguño.