Esporrín se muestra muy "feliz" y "orgullosa" tras lanzar el chupinazo que da comienzo a los Sanfermines

Actualizado: lunes, 6 julio 2009 15:31

PAMPLONA, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -

La concejal de PSN en Pamplona Maite Esporrín se mostró hoy, instantes después de lanzar el chupinazo que dio inicio a los Sanfermines 2009, "muy feliz" y "orgullosa" de vivir ese momento, y destacó que es "un instante para el recuerdo" del que "no tiene palabras para explicar".

La portavoz socialista en el Consistorio pamplonés, que se encontraba acompañada en el balcón del Ayuntamiento por su marido y sus hijos, aseguró que no le ha temblado el pulso mientras lanzaba el chupinazo, y subrayó que estaba "tranquila" porque "era como si estuviese hablando con un amigo, pero estaba hablando con millones". "Ha sido muy bonito y no tengo palabras para la emoción que he sentido", señaló.

Esporrín deseó que éstas sean unas fiestas "estupendas" en las que "todos lo pasemos muy bien y tengamos oportunidad de disfrutar". Además, mostró su deseo de que se dejen "los malos rollos para otro momento" y abogó porque sean unas fiestas "sanas" en las que "no haya heridos, ni accidentes, ni nada".

La concejal socialista hizo hincapié en que no se imaginaba que iba a ser "tan emocionante" el hecho de lanzar el chupinazo, y afirmó que "era como si estuviese hablando con toda la plaza". "Cuando hablabas la gente te respondía, era un momento que yo pensaba que iban a estar más cada uno a su bola, y que va, todo el mundo pendiente del balcón. Ha sido un momento muy emocionante, muy bonito, me siento muy feliz y muy orgullosa", sentenció.

El lanzamiento del chupinazo desató la euforia de las miles de personas que se congregaron en la plaza Consistorial y en las calles de alrededor para asistir al inicio de las fiestas y las de otras miles de personas que se reunieron en otros puntos de la ciudad como la Plaza del Castillo o el Paseo de Sarasate, donde se instalaron pantallas gigantes de televisión para seguir el chupinazo sin las aglomeraciones del centro neurálgico.

Con un día con nubes y sol y una temperatura agradable, los miles de asistentes al lanzamiento del cohete esperaron la hora vestidos de blanco, con el pañuelo rojo en alto y dirigido hacia la fachada del Ayuntamiento, entre gritos, bajo el lanzamiento de litros de champán, los confetis blancos y rojos disparados desde la Casa Consistorial y entre empujones.

INTERIOR DEL AYUNTAMIENTO

En el interior de la Casa Consistorial se reunieron las primeras autoridades políticas de Navarra para seguir el lanzamiento del chupinazo. Entre otras personalidades, se encontraban en el Ayuntamiento el presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz; la delegada del Gobierno en la Comunidad foral, Elma Sáiz; el consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Javier Caballero; y el consejero de Educación, Carlos Pérez-Nievas.

También hubo representación de los partidos políticos, con la presencia de la diputada de Nafarroa Bai en el Congreso y concejal del Ayuntamiento de Pamplona, Uxue Barkos; el parlamentario de CDN José Andrés Burguete y el europarlamentario del PPN, Pablo Zalba, entre otros. Además, estuvo presente el secretario de Estado para la Unión Europea, Diego López Garrido.

Minutos después del inicio de las fiestas y tras saludar a Maite Esporrín, Barcina reconoció a los medios de comunicación que en fiestas "hay que buscar lo que nos une, porque es mucho más de lo que tenemos de discrepancia", y que "esa magia que tiene San Fermín para todos los pamploneses también se tiene que notar en el Ayuntamiento".

Barcina, que este año cumple su décimo aniversario como alcaldesa, subrayó que va a disfrutar de sus undécimos Sanfermines, "una cifra mágica que espero me traiga suerte y estas sean unas fiestas fantásticas", a pesar del recorte presupuestario "que no se va a notar en la calle".

Por último, la alcaldesa se refirió también a la ausencia de incidentes con la ikurriña, y recalcó que esto es "magnífico" porque "estamos teniendo control", y "sobre todo", añadió, "lo que es una alegría es que se respeten las normas, la democracia, nuestras leyes". "Uno de mis mayores empeños desde que soy alcaldesa es que desde este balcón de la plaza Consistorial estuviesen ondeando aquellas banderas que nos hemos dado todos en Navarra a través del Amejoramiento y la Constitución", añadió.

El presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz, que también siguió el lanzamiento del chupinazo desde la Casa Consistorial, aseguró que "como cualquier ciudadano que ama esta ciudad y esta fiesta" disfrutará de los Sanfermines.

Sanz definió las fiestas de San Fermín como las "más universales y abiertas que existen en España" además de "nada clasistas". "Aquí con crisis o sin crisis uno se puede divertir con podo dinero, no hace falta mucho, en otras fiestas hace falta buen bolsillo para pasárselo bien pero en los Sanfermines te dejas arrastrar por muchos lugares y vas solo sin necesidad de llevar el bolsillo lleno", defendió.

Por su parte, la portavoz de Nafarroa Bai en Pamplona, Uxue Barkos, destacó que este año vive las fiestas "con la misma intensidad" aunque "no con la misma emoción" que en 2008, cuando lanzó el chupinazo que dió inicio a los Sanfermines. "Esta mañana he odio el chupinazo que lo retransmitian en alguna radio y la verdad que me he emocionado muchísimo", matizó.

Barkos puso de relieve que "los mejores Sanfermines siempre son los que tocan vivir ese año" y afirmó que el día 6 es "siempre" un "momento de expectativa y de lo mejor".

La concejal de ANV Marine Pueyo, que vestía una camiseta roja con la ikurriña, tuvo que presenciar el momento del chupinazo dentro de la plaza Consistorial, ya que momentos antes responsables de seguridad del Ayuntamiento le informaron que de así no podía salir al balcón, donde sí estuvo el también edil de ANV Mikel Gastesi.

Así, Pueyo explicó que se veía "obligada" a llevar esa camiseta "para reinvindicar que la ikurriña estuviera presente en el cohete del Ayuntamiento, porque eso es una lección de respeto para otras sensibilidades y es lo que deben hacer los que se llaman demócratas".

Por último, reconoció los "nervios" de este "momento tan especial", y explicó que vivirá las fiestas "de manera popular, siempre en la calle, potenciando todo tipo de actividades que estén organizadas por los colectivos populares, porque es una tarea pendiente".